El uso compulsivo de Internet puede acabar convirtiéndose en una patología

Abuso de internet y adicciones
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Actualizado: lunes, 2 abril 2018 17:33

MADRID, 2 Abr. (EUROPA PRESS) -

La realidad virtual ha proporcionado "un factor de desinhibición y absoluta libertad en algunos casos", que provoca "una evolución del uso compulsivo de Internet hasta convertirse en patología", según el psicólogo, psicopedagogo y especialista en educación infantil, Jorge López Pérez Vallejo.

"Nos encontramos ante patologías asociadas al uso de internet, compulsiones basadas en el placer y en el control de una realidad, que conducen a un desinterés hacia la interacción real y, en muchos casos, a una huida de la realidad para olvidar los problemas, momento en el que tanto el exceso de control, como tener esa salida, se convierten en una obsesión compulsiva y adictiva", ha advertido.

Así, el especialista ha incidido en que no sólo el juego 'on line' es un problema, son varios los casos de adicción a las redes sociales, llegando incluso a tener ansiedad y estrés si no se tiene cerca un móvil o si no recibes los suficientes "me gusta" en la última foto subida.

Por eso, López Vallejo asegura que, cuando se llega a esos extremos, existe la necesidad de un détox tecnológico en forma de tratamiento de adicción u obsesión adictiva, ya que "la obsesión los atrapa cuando abandonan sus obligaciones para dedicar todo el tiempo que tienen a Internet.

En caso de que si no pueden hacerlo, viven los síntomas de abstinencia que los lleva a un estado de angustia y una ansiedad que los hace irritables, llegando incluso a aparecer ataques de pánico, disminuyendo la capacidad de concentración y acción necesaria para llevar a cabo sus vidas con normalidad", ha matizado.

El problema de obsesión compulsiva puede ser muy variado pero con una causa común, las personas que lo padecen "suelen sufrir de trastornos psicológicos y de comportamiento que se deben tratar antes de que se conviertan en personas ansiosas, inseguras, introvertidas, con miedo al rechazo y la desaprobación social, desarrollando una personalidad con baja autoestima", ha concluido.