Tres de cada cuatro mujeres sufren al menos una infección vaginal a lo largo de su vida

Actualizado: martes, 7 octubre 2014 2:32

MADRID, 19 Feb. (EUROPA PRESS) -

La vulvovaginitis es una infección de la vulva y la vagina que es bastante frecuente en las mujeres en edad fértil, hasta el punto de que hasta tres de cada cuatro la padecerán al menos una vez en su vida, según datos presentados en el XIV Encuentro Nacional de Salud y Medicina de la Mujer (SAMEM 14) que se celebra estos días en Madrid.

La incidencia aumenta con el inicio de la actividad sexual y sus síntomas suelen empeorar una semana antes del ciclo menstrual de la mujer, indica la médico y farmacéutica Carme Pardo, ponente en este congreso.

Las principales molestias son escozor o picor vulvar, dolor, flujo vaginal, dolor o molestias durante el acto sexual o al orinar. Además, esta enfermedad afecta de manera directa a la calidad de vida de las pacientes y diversos estudios han demostrado que "las hace sentir inadecuadas, enfermas, sienten dolor y les impide tener relaciones sociales o de pareja", comenta la doctora.

Muchas de estas infecciones se repiten entre dos y cuatro veces al año en más de la mitad de los casos y se deben al hongo 'Candida', y para prevenirlo los expertos recomiendan cuidar la higiene íntima, llevar ropa adecuada, seguir una dieta sana y el uso de probióticos vaginales.

Estos últimos productos son cada vez más recomendados tanto por los ginecólogos como desde la oficina de farmacia para la prevención de las vulvovaginitis, reconoce Pardo, ya que "permite regenerar la flora vaginal y evita la reaparición de la candidiasis".

El problema es que el hongo 'Candida' forma parte de la flora normal del cuerpo humano, ya que se detecta en el tracto orointestinal en el 50 por ciento de los adultos, e incluso en hasta un 20 por ciento de mujeres que están asintomáticas.

Los cambios producidos en la flora vaginal normal, colonizada por lactobacilos, pueden dar lugar a un sobrecrecimiento de la 'Candida' y al desarrollo de una vulvovaginitis. Las causas de ese aumento pueden ser "la toma de antibióticos, los niveles hormonales elevados durante el embarazo o los estados de inmunodepresión", afirma.

El tratamiento "debe ser de fácil administración y tener buena aceptación por parte de la paciente para facilitar el cumplimiento, ser de acción fungicida y sintomática inmediata, con mínimos efectos secundarios, económico y que permita prevenir nuevas infecciones", asegura la doctora Pardo.

En caso ser una vulvovaginitis no complicada "el tratamiento comprende la administración de antimicóticos o antifúngicos tanto intravaginales como orales, o también en cremas", añade la doctora. Y en el caso de ser recurrentes y complicadas el tratamiento con antimicóticos será más largo.

NO FAVORECER EL HÁBITAT DE LA 'CANDIDA'

Además, recomienda una serie de medidas higiénicas entre las que se encuentran "evitar irritantes locales, como jabones o geles de ducha, evitar llevar ropa sintética y ajustada, mejor de algodón, o reducir la ingesta de hidratos de carbono ya que estos favorecen el hábitat de la 'Candida'".

Lo más importante, según los ginecólogos presentes en SAMEM 14, es que "ante cualquier síntoma o indicio" las mujeres acudan al especialista, sobre todo si es la primera vez que se sufre o los síntomas son diferentes a episodios previos, si la paciente es menor de 16 o mayor de 60 años, si ha tenido hemorragia menstrual anormal o flujo sanguinolento, dolor en el bajo vientre o los síntomas no mejoran tras siete días de tratamiento.

Además, el doctor Santiago Palacios, presidente de SAMEM 14 y director del Instituto Palacios, recuerda que el abordaje de cualquier caso en Atención Primaria debe incluir "el conocimiento de las situaciones clínicas que presentan signos y síntomas de alarma para derivar al ginecólogo, de los factores predisponentes, de las medidas higiénicas para tratarla y prevenirla y de los tratamientos disponibles y más adecuados para cada caso", concluye el doctor.