El tabaco y el sobrepeso pueden agravar los efectos de la artritis

Artritis reumatoide
POSITIVEFOCUS
Actualizado: miércoles, 2 marzo 2016 14:01

   MADRID, 2 Mar. (EUROPA PRESS) -

   El tabaco y el sobrepeso pueden agravar los efectos de la artritis, según han asegurado diversos expertos con motivo de la campaña 'Activo frente a la artritis, mes a mes', llevada a cabo por la Coordinadora Nacional de Artritis, ConArtritis, con la colaboración de las biofarmacéuticas Abbvie y Lilly.

   "En los últimos años el tabaquismo ha cobrado mucha importancia en el tratamiento de la artritis, ya que se ha visto que puede ser una causa para que se presente de una forma más agresiva", ha explicado el jefe de servicio de Reumatología del Hospital Clínico San Carlos de Madrid, Juan Ángel Jover.

   De hecho, el estudio 'Extra-articular disease manifestations in rheumatoid arthritis: incidence trens and risk factors over 46 years' indica que existe una mayor frecuencia de manifestaciones extraarticulares en las personas con artritis reumatoide fumadoras frente a los no fumadoras, siendo en ellos más común la aparición los nódulos reumatoides y la afectación pulmonar.

   Además, varias investigaciones indican que los fumadores presentan una peor respuesta al tratamiento, al necesitar un mayor número y más dosis de fármacos. Por ello, Jover ha destacado la necesidad de que los médicos indiquen al paciente la importancia de abandonar este hábito y que ellos sean conscientes que deben dejarlo.

   Asimismo, prosigue, otro órgano que se puede ver afectado por el proceso inflamatorio de la artritis es el corazón. De hecho, la pericarditis o inflación del pericardio surge en cerca del 50 por ciento de las personas con artritis reumatoide, especialmente en fases avanzadas, agravándose el problema si la persona presenta otros factores de riesgo cardiovascular.

   "La artritis es un factor de riesgo cardiovascular, más incluso que cualquier otra enfermedad inflamatoria, pero si además le sumamos el tabaquismo, la hipertensión, o la obesidad, vamos sumando factores que incrementan este riesgo. Además, existen estudios que indican que el exceso de peso también puede reducir los efectos del tratamiento farmacológico con anti-TNF y con FAMEs, mientras que la obesidad disminuye las probabilidades de alcanzar la remisión de la artritis", ha enfatizado.

   En este sentido, el doctor ha avisado de que es "muy difícil" que una persona con obesidad mórbida y artritis evolucione bien, aunque ha señalado que cuando se les somete a una cirugía bariátrica y se les trata la obesidad, mejoran notablemente de su artritis. "El sobrepeso no sólo supone una sobrecarga mecánica de las articulaciones, sino que genera un ambiente pro inflamatorio que hace que los efectos de la patología sean más agresivos y difíciles de controlar", ha subrayado.

LA ALIMENTACIÓN COMO ALIADA

   Por otra parte, el dietista-nutricionista Pablo Zumaquero ha informado de que el consumo prevalente de alimentos antiinflamatorios, como puede ser la cúrcuma o el jengibre, frente a los inflamatorios, como el trigo, sí puede influir en el control de la enfermedad, ya que si se aporta al organismo más materia prima con la que crear sustancias antiinflamatorias, será "más probable" reducir el estado general de inflamación que tienen las personas con artritis.

   Ahora bien, prosigue, no se puede hacer una clasificación de alimentos "estrellas" y "prohibidos" para ellos, por lo que ha abogado por hablar de una estrategia dietética "buena", como la dieta mediterránea, en la que la base sean las verduras, las hortalizas y las frutas; con una aportación proteica de calidad a través de los huevos, la carne magra y el pescado, aumentando el de tipo azul; con el aceite de oliva como fuente de grasa principal, y reduciendo un poco los cereales, especialmente el trigo.

   "Sí se debe prescindir de ciertos productos alimenticios. Se debe eliminar por completo los productos procesados y ultra-procesados, como la bollería, los refrescos, los snacks de bolsa, etcétera, debido al efecto inflamatorio que produce la combinación de sus ingredientes, entre los que se suelen encontrar el azúcar, la harina refinada y las grasas de mala calidad. Al organismo no le hace falta estás sustancias y sin ellas se pueden notar mejorías", ha señalado.