La OMS alerta de que las tabaqueras están centrando sus campañas en el sector femenino

Mujer fumando
Reuters
Actualizado: miércoles, 30 mayo 2012 18:03

MADRID, 30 May. (EUROPA PRESS) -

La oficina regional de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en Europa ha alertado de que las nuevas tácticas de mercado de la industria tabaquera está redirigiendo sus campañas de marketing al sector femenino, lo que supone una amenaza para la salud pública que ya se ha traducido en un incremento del tabaquismo en mujeres y adolescentes de esta región.

Así lo ha reconocido esta entidad con motivo del Día Mundial sin Tabaco que se celebra este jueves, 31 de mayo, que informa de que hasta un 22 por ciento de las mujeres de esta región fuma, un porcentaje elevado si se compara con África, Asia y Oriente Medio, donde sólo fuma entre un 3 y 5 por ciento de las personas de dicho sexo.

Aunque el consumo de tabaco ha sido en gran medida un fenómeno masculino, la diferencia en la prevalencia entre adultos de ambos sexos es ahora más pequeña en países como Austria, Dinamarca, Irlanda, Países Bajos, Reino Unido, Noruega y Suecia.

De hecho, en estos dos últimos países escandinavos (Suecia y Noruega) el consumo diario ya es mayor entre las mujeres, mientras que en otros países como Bulgaria, Croacia, Polonia y Eslovenia, fuman más niñas que niños.

Esto se debe, según ha explicado la directora regional de la OMS-Europa, Zsuzsanna Jakab, a que "las tabaqueras han visto en lo que hasta ahora eran unas bajas tasas de fumadoras una oportunidad de mercado".

La explicación de esta redirección de sus objetivos puede deberse también a un aumento del poder adquisitivo de las mujeres, lo que ha llevado a la industria a mostrar el tabaquismo como un símbolo de la autonomía, la emancipación y el éxito.

De hecho, aseguran que la publicación en 2009 en Rusia de una revista para público femenino que llevaba una mujer fumando y un hombre detrás de ella ha contribuido a que aumente un 117 por ciento el consumo de tabaco entre las mujeres.

Además, advierte de que la conciencia de los riesgos para la salud del consumo de tabaco es insuficiente y se subestima la naturaleza adictiva del tabaco, al tiempo que sigue siendo legal la comercialización de marcas con términos engañosos como 'light' o 'suave'.