Investigan una vacuna para proteger del ictus al cerebro

Ictus, cabeza, parálisis
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Actualizado: lunes, 22 febrero 2016 10:17

   MADRID, 22 Feb. (EUROPA PRESS) -

   Un tipo de vacuna previamente estudiado para tratar la presión arterial alta puede tener potencial para proteger el cerebro cuando se administra antes de un accidente cerebrovascular, según concluye un estudio realizado en animales y cuyos resultados se presentan en la Conferencia Internacional sobre el Ictus 2016, organizada por la Asociación Americana del Ictus.

   Científicos japoneses probaron una vacuna de péptido que se dirige a la hormona angiotensina II (Ang II) un jugador clave en la presión arterial alta. Los miembros del equipo previamente habían encontrado que su vacuna peptídica disminuía la presión arterial en un modelo de ratón con hipertensión, mientras que la presión de la sangre de roedores con con lecturas normales no se vio afectada.

   La hormona también se ha relacionado con el pronóstico de los pacientes después de un accidente cerebrovascular isquémico (causado por un coágulo). En el nuevo estudio, los investigadores inyectaron en 53 ratas macho la vacuna tres veces, a las 4, 6 y 7 semanas de edad, y administró a un segundo grupo de 41 solución salina en los mismos intervalos. Se indujo el ictus en ratas vacunadas y ratas que recibieron solución salina.

   Posteriormente, el equipo midió los niveles de anticuerpos anti-Ang II en la sangre y el cerebro de las ratas que recibieron la vacuna y que sufrieron un accidente cerebrovascular. En comparación con las ratas que tenían niveles bajos de anticuerpo, los animales con altos niveles en la sangre presentaban más anticuerpos anti- Ang II en tejido funcional en el lado del cerebro donde ocurrió el accidente cerebrovascular.

   Los investigadores también observaron que las ratas vacunadas que produjeron altos niveles en sangre del anticuerpo registraron menos daños en el cerebro y un menor número de neuronas degeneradas. Como la vacuna de péptido Ang II es de larga duración, tiene efectos anti-inflamatorios y parece ser capaz de proteger el cerebro después de un bloqueo de los vasos sanguíneos, con potencial para ser una terapia para la hipertensión arterial y la prevención del ictus, señalan los investigadores.