Gripe.- Poca demanda y dudas, la tónica en la primera semana de vacunación de la gripe A, según los médicos de familia

Actualizado: viernes, 20 noviembre 2009 15:55

Estiman que se utilizarán poco más de la mitad de los 10 millones de vacunas preparadas, un porcentaje de vacunación similar al de la campaña de gripe estacional

MADRID, 20 Nov. (EUROPA PRESS) -

La primera semana de la campaña de vacunación frente a la gripe A se ha desarrollado con tranquilidad, poca demanda, sin saturación en los centros de salud y con dudas sobre la seguridad de las vacunas, según destacó hoy José María Molero, portavoz del Grupo de Enfermedades Infecciosas de la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (semFYC), entidad que agrupa a unos 20.000 facultativos de toda España.

Según explicó este experto, la mayor parte de la población que se ha vacunado en estos primeros días han sido sobre todo personas con alguna enfermedad crónica que ya se habían vacunado contra la gripe estacional y que, por tanto, "ya estaban avisados" de que deberían vacunarse también contra la gripe A ya que ambas "son complementarias".

Entre estos, se ha inmunizado más a personas mayores de 60 años ya que, declaró Molero a Europa Press, "han sido los más interesados en recibir esta nueva vacuna, incluso aunque no estén entre los grupos de riesgo para esta gripe". Tras estos, los niños con patologías crónicas también han sido de los primeros en vacunarse porque los padres "o están muy sensibilizados o se dejan aconsejar más por el médico".

En otras edades, por contra, se ha detectado "más pasividad" y algunos enfermos crónicos han rechazado la vacunación "alegando que ya se habían vacunado de la estacional o que iban a pensárselo o esperar un poco".

Además, en estos pacientes más jóvenes la "captación es más difícil", como también sucede para vacunarles contra la gripe estacional, ya que acuden menos a las consultas, por lo que pidió desarrollar otro tipo de estrategias para recordarles la importancia de ser inmunizados.

En cualquier caso, los profesionales de Atención Primaria destacan la "falta de demanda" en comparación con otras campañas de la gripe estacional, como sucedió hace unos años coincidiendo con los primeros casos de gripe aviar en el mundo. "Se ha perdido el miedo a la enfermedad y la demanda de vacunas de los primeros meses se ha acabando diluyendo", advirtió.

De hecho, según las previsiones de semFYC, de los 10 millones de vacunas que el Ministerio de Sanidad y Política Social prevé administrar sólo se acabarán utilizando "poco más de la mitad", señaló Molero, pese a que "a la larga, algunos que ahora dicen que no se van a vacunar, lo acabarán haciendo". Estas cifras de éxito de la campaña de vacunación, no obstante, son similares a las que cada año se obtienen con la vacuna de la gripe estacional.

En cuanto al resto de grupos de riesgo, desde personal sociosanitario a miembros de servicios esenciales, reconoció que existe un "menor control" por parte de Atención Primaria ya que muchos colectivos como policías o bomberos se vacunan a través de sus mutuas mientras que, en el caso de personal hospitalario, se inmunizan a través de sus servicios de Medicina Preventiva.

"¿POR QUÉ ME TENGO QUE VACUNAR?"

El motivo de esta "escasa demanda", señaló este experto, está fundamentada también en las dudas que se han creado en torno a la seguridad que puede ofrecer la vacuna y a las reticencias de algunos colectivos sanitarios a inmunizarse frente al virus H1N1. "¿Por qué me tengo que vacunar? ¿Hay médicos que no lo van a hacer, usted sí?", son las preguntas más frecuentes en las consultas estos días, explicó Molero.

Esto se debe a que "se han puesto en duda tanto los procesos de elaboración de la vacuna como la existencia de posibles efectos adversos con su vacunación", advirtió, algo a lo que tampoco han ayudado algunos profesionales sanitarios que, a su juicio, han trasladado a los ciudadanos el mensaje de que "se iban a vacunar sin seguridad".

En relación a estas dudas dentro de la profesión sanitaria, este portavoz de semFYC recordó la baja tasa de vacunación que hay entre estos profesionales, de entre un 15 al 30 por ciento en los mejores casos, con la gripe estacional. Además, de todos ellos, aseguró, "el médico es el que menos se vacuna".