Un experto recuerda que el alcohol es un factor de riesgo para pacientes con diabetes

Obesidad y diabetes
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Actualizado: viernes, 4 mayo 2018 11:45

MADRID, 4 May. (EUROPA PRESS) -

El doctor Francisco Javier Laso Guzmán, coordinador del Grupo de Alcohol y Alcoholismo de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI), ha advertido de las consecuencias del consumo de alcohol en el manejo de la diabetes mellitus, el subtipo más común de la enfermedad.

"Existe un alto riesgo de hipoglucemias tanto con el consumo de alcohol diario como intensivo (en atracones), lo cual es debido a los propios efectos del alcohol sobre el metabolismo de la glucosa y a sus interacciones con los fármacos antidiabéticos", ha señalado el experto.

Asimismo, cita numerosos estudios que han vinculado el consumo crónico de alcohol en el paciente diabético a una menor adherencia y cumplimiento terapéutico, lo que a su juicio conlleva "un peor control glucémico y mayor incidencia de complicaciones derivadas de la diabetes, entre ellas la polineuropatía, que también es un efecto tóxico del propio alcohol".

"Por tanto, el alcohol ha de ser considerado un factor de riesgo para un peor control glucémico y una mayor progresión de la enfermedad, y por ello es necesaria una intervención específica por parte de los médicos desaconsejando su consumo en pacientes diabéticos", ha comentado el doctor.

En total, el consumo excesivo de alcohol está implicado en más de 200 enfermedades. Pese a todo, en España es la sustancia de abuso más consumida, según los datos de la encuesta por edades del Plan Nacional sobre Drogas. Se estima que, en el último año, alrededor de un 80 por ciento de la población lo ha ingerido y, además, afecta también a los más jóvenes, ya que un 30 por ciento de las personas de entre 15 y 17 años ha bebido alcohol "de forma intensiva" en los últimos doce meses.

Para abordar esta problemática, sus consecuencias y las últimas novedades en la biología del alcoholismo, la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI) celebra este viernes en Madrid la V Jornada sobre Alcohol y Alcoholismo. Se contemplará el consumo de alcohol bajo las vertienes de la práctica clínica, la investigación y la divulgación (difusión mediática).

Desde el punto de vista clínico, los expertos enfatizarán la importancia que tiene el abordaje multidisciplinar en estos pacientes y destacarán el papel central de la Medicina Interna en la asistencia a pacientes alcohólicos. Como ejemplo de este abordaje multidisciplinar, durante la jornada se abordará la experiencia de trabajo conjunto entre internistas y psiquiatras en el Hospital Gregorio Marañón de Madrid.

AVANCES EN LA BIOLOGÍA DEL ALCOHOLISMO

En los últimos años, los avances principales en la biología del alcoholismo se centran en telómeros, microbiota y micro ARN (miARN). Los telómeros son fragmentos de ADN que protegen al material genético de la posible degradación y se acortan progresivamente a lo largo de la vida, por lo que su longitud es considerada como un marcador de la edad biológica de los pacientes, relacionándose además con la aparición de tumores y otras enfermedades asociadas al envejecimiento.

"Desde el Grupo de Alcohol y Alcoholismo de la SEMI hemos sido los primeros que hemos conseguido demostrar un acortamiento de los telómeros en pacientes con alcoholismo crónico, lo que podría contribuir también a un acortamiento de la vida y al posible desarrollo de neoplasias", ha asegurado el especialista.

Por su parte, los progresos también abordan la importancia de determinar si la microbiota intestinal (conjunto de bacterias que habita en el intestino) se encuentra afectada por el consumo de alcohol o si, por el contrario, es la causa de que un paciente sea más proclive a su consumo. "Se han realizado estudios en este sentido desde el Departamento de Psicobiología de la Universidad Complutense, llevados a cabo por el profesor López Moreno, comprobando que la preferencia y el consumo de alcohol sí está regulado por la microbiota intestinal", ha recalcado el doctor.

"Por ejemplo, transferir microbiota intestinal de un animal dependiente de alcohol a otro animal que no lo es hace que este último beba significativamente más alcohol. Por tanto, la manipulación de la microbiota intestinal, por ejemplo, a través de psicobióticos (prebióticos y probióticos), podría ser relevante para el tratamiento de los trastornos asociados al alcohol", ha explicado el doctor Francisco Javier Laso Guzmán.

Por último, los miARN son pequeñas moléculas que regulan la expresión de determinados genes y están implicados en prácticamente todos los procesos fisiológicos y patológicos.

"Recientemente, se ha demostrado (con una importante contribución de investigadores de nuestro grupo en la Universidad de Salamanca) una relación entre el consumo de alcohol y alteraciones en la expresión de diferentes miARN. Lo más destacable es el papel que juegan de los miARN en el desarrollo de la enfermedad hepática alcohólica, al promover importantes cambios inflamatorios en el hígado de pacientes alcohólicos crónicos", ha concluido el experto.