MADRID, 18 Oct. (EUROPA PRESS) -
Evitar las quemaduras solares, arañazos o picaduras de insectos así como las inyecciones, extracciones de sangre o la toma de tensión en el brazo de las mujeres que, por el cáncer de mama, han sufrido una extracción de los ganglios linfáticos, son algunos consejos de la experta Beatriz Camós, de la ortopedia de Grau Soler.
Tras la extracción, a las pacientes "se les da una serie de pautas", explica Camós a Europa Press, quien precisa que, entre ellas, está que "no deben hacer esfuerzos con el brazo" afectado, mantener la piel bien hidratada o evitar las saunas y salas de vapor. También, mantener un programa de ejercicios recomendados, dormir con el brazo afectado ligeramente elevado e informar al médico sobre cualquier cambio.
"Las mujeres tienen que ir con mucho cuidado", reitera esta experta a la par que advierte de que "cualquier herida" podría ocasionar el edema linfático y, después, "no hay vuelta atrás".
Asimismo, esta experta considera que, entre las medidas de prevención, está la del uso de un guante o una manga comprensora, siempre prescrita por médicos. Esta media frena, según el grado de afectación de la persona, la progresión del linfedema. Existen diferentes tipos de mallas con dos tricotados diferentes: el circular y plano. Esta malla se diseña a medida según el contorno del brazo y la comprensión necesaria.
Entre un 10 y 30 por ciento de los casos en los que hay que realizar una mastectomía, hay que extirpar también los ganglios linfáticos de la axila. A raíz de esto, pueden producirse edemas linfáticos o linfedemas, que produce la acumulación de líquido linfático. Una circunstancia que causa hinchazón en el brazo y en la mano.
ESCOTES MÁS ELEVADOS
Por otra parte, Camós informa de que, existen casos en los que la paciente sufre una mastectomía y no puede someterse a una reconstrucción mamaria. Para estos supuestos, su empresa Grau Soler ofrece una gama de productos para que la mujer "recupere la confianza".
De este modo, explica que su compañía cuenta con prótesis provisionales para cuando la mujer está en el hospital y para después de su ingreso. También, elementos ortopédicos para mastectomias parciales o totales y para diferentes edades. Además, "tenemos corsetería, desde la gama más sencilla hasta la de fantasía", señala. Todas las prendas de la tienda están elaboradas con tejidos naturales como lino, algodón o seda.
Por último, el personal especializado de la tienda explica a la mujer cómo tienen que colocarse las prendas. Por lo general, éstas suelen tener tirantes ajustables y "cómodos" en algunos modelos anchos; copas adecuadas a cada perfil; bolsillos para que mantengan la prótesis en su lugar; broches regulables en la espalda y escotes más elevados de lo habitual.
