Dormir mucho o poco aumenta el riesgo de diabetes en hombres

Hombre, dormir
GETTY
Actualizado: jueves, 30 junio 2016 5:56

   MADRID, 30 Jun. (EUROPA PRESS) -

    El sueño juega un papel vital en la salud de las personas. Muchas veces solo nos centramos en la importancia del sueño de buena calidad del sueño y no nos damos cuenta de que el tiempo dedicado al sueño puede ser tan relevante para nuestra salud.

    Según los expertos, la duración óptima del sueño de los adultos para una buena salud a nivel poblacional es entre 7 y 9 horas, aunque abren la puerta a una variabilidad individual. Mientras una duración corta del sueño (seis horas o menos para un periodo de 24 horas) se asocia con resultados adversos, incluida la mortalidad, pero un sueño demasiado largo (> 9-10 horas en un periodo de 24 horas) también puede estar asociado con resultados negativos para la salud.

    Lo cierto es que son varios los grupos de investigadores que han alertado de que dormir menos de seis horas o más de nueve puede acarrear problemas de salud graves. La última investigación ha sido publicada este miércoles en 'Journal of Clinical Endocrinology & Metabolism', la revista de la Sociedad de Endocrinología Americana, y afirma que los hombres que duermen menos o más horas de promedio pueden enfrentarse a un mayor riesgo de desarrollar diabetes.

   Más de 29 millones de personas en Estados Unidos padecen diabetes, según datos y cifras del Informe Endocrino de la Sociedad de Endocrinología. Durante los últimos 50 años, la duración del sueño media declarada por los individuos ha disminuido en entre 1,5 y 2 horas, según el autor principal del estudio, Femke Rutters, del Centro Médico VU en Amsterdam, Países Bajos. La prevalencia de la diabetes se ha duplicado en el mismo periodo de tiempo.

   "En un grupo de cerca de 800 personas sanas, observamos relaciones específicas del género entre la duración del sueño y el metabolismo de la glucosa --señala Rutters--. En los hombres, dormir demasiado o muy poco estaba relacionado con menos capacidad de respuesta de las células a la insulina, la reducción de la captación de glucosa y, por lo tanto, un aumento en el riesgo de desarrollar diabetes en el futuro. En las mujeres, no se observó tal asociación".

   El estudio transversal examinó los factores de riesgo para la diabetes y la duración del sueño en 788 personas. Los investigadores analizaron un subgrupo de participantes del 'European Relationship between Insulin Sensitivity and Cardiovascular Disease' (EGIR-RISC), que eran adultos sanos de entre 30 y 60 años de edad. Los participantes del estudio fueron reclutados de 19 centros de estudio en 14 países europeos.

   Los científicos midieron el sueño de los participantes y la actividad física mediante un acelerómetro de eje único, un dispositivo para rastrear el movimiento. Para evaluar el riesgo para la diabetes, los autores utilizaron un dispositivo llamado una abrazadera hiperinsulinémica euglucémica para medir la eficacia con la que el cuerpo utiliza la hormona insulina, que procesa el azúcar en la sangre.

DETERIORO EN LA CAPACIDAD DE PROCESAR EL AZÚCAR

   El análisis encontró que los hombres que dormían menos y más eran más propensos a tener deteriorada la capacidad para procesar el azúcar en comparación con los hombres que dormían una cantidad media, alrededor de siete horas. Los hombres en los dos extremos del espectro presentaban niveles de azúcar en la sangre más altos que los hombres que durmieron la cantidad promedio de sueño.

   Sin embargo, las mujeres que dormían menos o más de lo normal eran más sensibles a la hormona insulina que las que habían dormido la cantidad media. También tenían una mayor función de las células beta, las células del páncreas que producen la hormona insulina, lo que sugiere que la pérdida de sueño no lleva a las mujeres a tener más riesgo de desarrollar diabetes.

   El estudio es el primero en mostrar efectos opuestos del sueño perdido en el riesgo de diabetes en hombres y mujeres, según los autores, que teorizan que esto puede ser el resultado de que la población de estudio se compone de individuos sanos, en lugar de aquellos en riesgo de desarrollar diabetes. "Incluso cuando se está sano, dormir demasiado o muy poco puede tener efectos perjudiciales sobre su salud. Esta investigación demuestra lo importante que es el sueño para la salud y el metabolismo de la glucosa", concluye Rutters.