Detectan memoria oculta en pacientes de UCI con lesiones cerebrales

UVI, UCI, cuidados intensivos, paciente intubado
UVI, UCI, cuidados intensivos, paciente intubado - ATS - Archivo
Publicado: viernes, 28 junio 2019 7:17

   MADRID, 28 Jun. (EUROPA PRESS) -

   Un análisis detallado de los datos de electroencefalografía (EEG) revela que casi uno de cada siete pacientes de UCI con lesiones cerebrales muestra evidencia de conciencia oculta solo días después de la lesión. Los pacientes con tales signos tienen más probabilidades de recuperarse, según han descubierto neurólogos de la Universidad de Columbia y el Hospital Presbiteriano de Nueva York.

   En el estudio, los investigadores utilizaron una técnica de aprendizaje automático para analizar los datos de EEG estándar recogidos de 104 pacientes que no respondían para buscar actividad cerebral específica del paciente, lo que indica que podían entender las instrucciones para mover las manos.

   Si los hallazgos, que se publican en la revista 'New England Journal of Medicine', se confirman en estudios más amplios, la técnica podría ayudar a los médicos a predecir mejor qué pacientes probablemente recuperarán la conciencia.

   "Aunque nuestro estudio fue pequeño, sugiere que el EEG, una herramienta que está fácilmente disponible junto a la cama del paciente en la UCI en casi cualquier hospital del mundo, tiene el potencial de cambiar por completo la forma en que manejamos a los pacientes con lesión cerebral aguda", augura Jan Claassen, profesor asociado de Neurología en el Colegio de Médicos y Cirujanos de Vagelos de la Universidad de Columbia y director de la Unidad de Cuidados Intensivos Neurológicos en el Centro Médico de Nueva York Presbiteriano de Columbia.

   Actualmente, no hay una forma ideal de predecir con precisión la posibilidad de recuperación para todos los pacientes inconscientes con lesiones cerebrales.

   La electroencefalografía se usa comúnmente en cuidados intensivos para monitorizar a pacientes críticamente enfermos con riesgo de convulsiones, y puede ser una forma relativamente fácil y rápida de identificar signos de conciencia oculta en pacientes que no responden y que han sufrido recientemente una lesión cerebral.

   Las complejas conversaciones entre las familias y los profesionales sanitarios determinan la intensidad del apoyo médico, y la decisión de retirar las terapias de soporte vital de los pacientes que parecen tener pocas posibilidades de recuperarse se toma frecuentemente dentro de las primeras semanas posteriores a la lesión cerebral.

   Los médicos utilizan exámenes neurológicos junto a la cama, estudios de imagen y electrofisiológicos, y valores de laboratorio para estimar la probabilidad de recuperación para las personas que no responden en los días y semanas posteriores a sufrir una lesión cerebral. Sin embargo, estas predicciones son frecuentemente inexactas.

   Sin embargo, cada vez más, los estudios sugieren que algunos pacientes que no responden pueden tener habilidades cognitivas ocultas, y que la recuperación tardía es más común de lo que se pensaba anteriormente.

   La conciencia oculta se identificó por primera vez hace más de una década utilizando la resonancia magnética (RM) en un paciente con lesión cerebral que no había respondido durante años. Desde entonces, los estudios que utilizan RM o EEG han detectado signos de conciencia oculta en el 14% de los pacientes que no responden crónicamente. Pero la resonancia magnética es difícil de realizar en un entorno de atención crítica.

   "Uno de los problemas más desafiantes en la UCI es predecir la recuperación, y no solo la supervivencia, para los pacientes que están inconscientes después de una lesión cerebral --destaca Claassen--. Desde los primeros estudios que describen la conciencia oculta, hemos estado buscando una forma práctica de hacerlo en los primeros días después de la lesión cerebral, cuando a menudo se toman decisiones de tratamiento que afectan los resultados".

   Claassen y su equipo estudiaron a 104 pacientes adultos en una unidad de cuidados intensivos que recientemente habían sufrido una lesión cerebral súbita debido a hemorragia, trauma o falta de oxígeno. Aunque ninguno de los pacientes estaba paralizado, no podían hablar y no respondían a las órdenes de moverse (por ejemplo, cerrar el puño o mover los dedos de los pies).

   Todos los días, además de los exámenes neurológicos estándar, a los pacientes se les pedía varias veces que abrieran y cerraran sus manos o que dejaran de abrir y cerrar sus manos. Se utilizó un algoritmo complejo para analizar los datos de EEG de estas sesiones para buscar signos de que un paciente detectó una diferencia entre las órdenes. Los investigadores siguieron con pacientes que fueron dados de alta del hospital un año después.

   A los 4 días de la lesión, el 15% de los pacientes que aún no respondían tenían patrones de actividad cerebral que sugerían una conciencia oculta en al menos un registro de EEG. Entre los pacientes con estos patrones, el 50% mejoró y pudo seguir instrucciones verbales antes de ser dado de alta del hospital, en comparación con el 26% de los que no tenían tal actividad cerebral.

   Un año más tarde, el 44% de los pacientes con patrones de actividad cerebral pudieron funcionar de forma independiente hasta 8 horas por día, en comparación con solo el 14% de los que no tenían tales señales.

   Las señales de conciencia oculta también fueron más comunes en pacientes con lesiones cerebrales por hemorragia y traumatismo que por falta de oxígeno. Sin embargo, el estudio careció de suficiente poder estadístico para determinar el valor predictivo del análisis EEG a través de diferentes causas de lesión cerebral.

   "Este estudio muestra que algunos pacientes que no responden durante días o más pueden tener capacidades de procesamiento cognitivo suficientes para distinguir los comandos, y esos pacientes tienen una mayor probabilidad de recuperarse", dice Claassen.