Las demandas por mala praxis médica en los casos de ébola en Texas (EEUU) se enfrentarían a obstáculos legales

Actualizado: viernes, 3 julio 2015 8:34

NUEVA YORK, 7 Oct. (Reuters/EP) -

Las posibles demandas por malas prácticas médicas contra el hospital de Dallas, en el estado de Texas, en lo que respecta a los casos de ébola, se enfrentarían a fuertes obstáculos legales para poder prosperar debido a las férreas leyes estatales en la materia, según sugieren varios expertos.

El no diagnosticar correctamente una enfermedad es una base común para las demandas por negligencia, pero cada estado tiene sus propias normas y las de Texas son unas de las más permisivas en torno a los errores del equipo médico, según explica Joanne Doroshow, directora del Centro de Justicia y Democracia de New York.

Estas declaraciones llegan después de que los medios de comunicación estadounidenses recogieran un posible caso de negligencia en torno a la atención recibida por Thomas Eric Duncan, paciente infectado por ébola que se encuentra en estado crítico en el hospital de Dallas. Aunque se desconoce si algún familiar o persona en riesgo de contagio interpondrá una demanda.

Duncan visitó por primera vez la sala de emergencias del Hospital Presbiteriano de Salud de Texas la noche del pasado 25 de septiembre, informando a una enfermera de que acababa de regresar de Liberia. Sin embargo, fue enviado a casa con antibióticos.

Sólo tres días después, el domingo 28 de septiembre, tuvo que ser ingresado después de que sus síntomas empeoraran, convirtiéndose en el primer paciente en recibir un diagnóstico por ébola en Estados Unidos.

El gobernador de Texas, Rick Perry, ha reconocido este lunes que se han producido "errores" a la hora de manejar el diagnóstico de ébola, tal y como vienen denunciando una serie de funcionarios y expertos en salud durante los últimos días.

Funcionarios de salud han identificado a diez personas que tuvieron contacto con el paciente durante los días que pasó enfermo en casa, incluyendo a los miembros de su familia y a los trabajadores sanitarios. Asimismo, están supervisando a otras 38 personas que podrían haber estado expuestas.