Hasta un 30% de los casos de fracaso escolar en España tiene su origen en problemas visuales

Actualizado: domingo, 5 julio 2015 14:12


MADRID, 8 Sep. (EUROPA PRESS) -

Hasta un 30 por ciento de los casos de fracaso escolar en España tiene su origen en problemas visuales, según ha asegurado el director médico de Clínica Baviera, el doctor Fermando Llovet, quien considera que es una cifra excesiva teniendo en cuenta que la mayoría de los defectos oculares que afectan al rendimiento de los escolares pueden diagnosticarse en revisiones oftalmológicas sencillas.

Es importante detectar ese tipo de problemas lo mas pronto posible, por lo que los padres y educadores tienen que poner especial atención en los niños ya que conductas como un ladeo excesivo de la cabeza puede denotar la existencia de astigmatismo. Acercarse demasiado al libro o la pantalla del dispositivo electrónico puede ser un síntoma de miopía, y el enrojecimiento y el picor en los ojos o párpados podría evidenciar un exceso de acomodación.

"Detectar estos casos de forma temprana facilitará su corrección y permitirá un rendimiento satisfactorio en clase", explica Llovet. Además el experto ha querido recordar que "es muy importante acudir al oftalmólogo: una primera visita entre los 6 y los 8 meses de

edad y con periodicidad anual a partir de los 4 años si no se detectan anomalías anteriormente".

En los últimos años se ha detectado un incremento en la prevalencia de la miopía y un crecimiento más rápido de las dioptrías, especialmente en miopes juveniles, en la población de los países desarrollados. Este hecho se explica por el creciente esfuerzo en visión cercana realizando desde la edad escolar y que se prolonga en la vida laboral.

RECOMENDACIONES PARA UNA VISTA SANA

Los oftalmólogos recuerdan que hay que contar con una vista sana y unos hábitos saludables a lo largo de toda la vida académica y en el entorno laboral.

Por ello el doctor Llovet recomienda trabajar a más de 40 centímetros de la pantalla del ordenador, haciendo descansos de 5 minutos cada media hora; proteger siempre los ojos del sol con gafas homologadas; potenciar una alimentación rica en vitamina A (en el caso de los menores; leer y estudiar con una iluminación correcta y no forzar los ojos cuando ya existen síntomas de cansancio.