MADRID, 18 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Navidad es una buena época del año para detectar trastornos de la alimentación como la anorexia y la bulimia, ya que las reuniones en torno a una mesa con abundante comida que se dan en estas fechas hacen que las personas que los sufren manifiesten consuctas inusuales para evitar enfrentarse a ellas, tal como han afirmado las psicólogas especializadas en trastornos de la alimentación, Begoña Charro y María Sánchez.
Estas fechas señaladas suponen un sufrimiento para estas personas y sus familiares, y las citadas doctoras, que dirigen la Unidad de Trastornos de la Alimentación de Avances Médicos (AMSA) de Grupo IMQ, han ofrecido una serie de pautas para detectar posibles casos.
Estas señales de alerta pueden ser realizar los días previos dietas muy severas o ayunos; los cambios bruscos en los gustos alimentarios, como evitar alimentos que antes sí se consumían; beber grandes cantidades de agua antes de las comidas; evitar el aceite, harinas, embutidos y dulces con aumento del consumo de frutas y verduras; desmenuzar los alimentos, comiéndolos en partes pequeñas de forma lenta; coleccionar recetas y cocinar; evitar acudir a estas reuniones donde pueda verse obligado a comer, manifestando signos de ansiedad y tristeza; realizar actividad física excesiva o necesidad de moverse o mover alguna parte del cuerpo continuamente, notándose una dificultad por mantenerse sentado durante el periodo de sobremesa; y pesarse varias veces al día o pasarse mucho tiempo frente al espejo.
Las psicólogas de la Unidad de Trastornos han ofrecido también algunas claves para tratar a los que sufren estas alteraciones. "Lo primero que se debe hacer es trabajar la conciencia de enfermedad y la motivación para el cambio. Una vez concienciadas, las personas son escuchadas y encuentran un espacio para hablar de sus miedos y obsesiones y liberan sus temores", han explicado.
En la unidad se trabaja tanto a nivel grupal como individual. Los grupos que se realizan tienen que ver con manejo de ansiedad y relajación, autoestima y reestructuración cognitiva, musicoterapia y arteterapia, psicoeducación nutricional y farmacológica y grupos dinámicos para pacientes y familiares.
