Meriendas sanas para niños y adultos

Meriendas sanas
ASOCIACIÓN 5 AL DÍA
Actualizado: lunes, 22 febrero 2016 14:11

   MADRID, 22 Feb. (EDIZIONES) -

   Mantener una alimentación equilibrada requiere aprender a distribuir bien los alimentos que se ingieren a lo largo del día y, según la evidencia científica, es necesario realizar tres comidas principales al día --desayuno, comida y cena--, y dos intermedias entre ellas, la merienda de la mañana y la de la tarde.

   En este sentido, la merienda y la toma de media mañana son las ingestas que se necesitan cuando pasan más de 4-5 horas entre el desayuno y la comida o entre ésta y la cena, y especialmente cuando se realiza un actividad física importante ya sea en el trabajo o practicando un deporte.

   Sin embargo, en estas tomas intermedias es cuando se suelen comer alimentos poco saludables como los aperitivos fritos y salados, bollería, golosinas o refrescos. Esto no sólo ocurre con los adultos, sino que los niños y adolescentes son edades en las que esta práctica es más habitual.

   Con el objetivo de evitar las calorías, la fundación '5 al día' ha ofrecido una serie de consejos para preparar meriendas saludables:

   1.- Fruta fresca. Uvas, mandarinas, fresas o fruta cortada para los niños siempre es una opción fácil, económica y muy saludable. También una buena opción es la combinación de frutas desecadas con frutos secos sin sal (almendras, nueces o avellanas)

   2.- Snacks de uva y queso fresco. Podemos preparar muy fácilmente unas "minibrochetas" saludables, insertando en un palillo un taquito de queso y una uva. Una receta rápida y divertida, en la que podemos involucrar a los más pequeños de la casa. Esto también puede hacerse con tomates cherry y queso.

   3.- Yogur con frutas. Otra opción muy adecuada en añadir a un yogur bajo en grasa, la fruta troceada que más nos guste: manzana, pera, piña, fresas, etc.

   4.- Batido de frutas frescas, por ejemplo fresas. Para preparar un sencillo batido de fresas solo necesitamos triturar 5-6 fresas grandes junto con medio vaso de leche baja en grasa. Si hacemos ejercicio físico, podemos acompañarlo con un puñadito de frutos secos sin sal o un bocadillo pequeño de fiambre magro o queso fresco.

5.- Algo salado. Por ejemplo bocadillo de pan integral con queso tierno, atún, salmón, sardinillas o una loncha de embutido magro junto con brotes tiernos de lechuga, tomate en rodajas o pimiento y unas gotas de aceite de oliva. Muy saludable y ligero. Para acompañar, nada mejor que una fruta fresca y un vaso de agua.

   "Las meriendas son ingestas que contribuyen a equilibrada la dieta diaria y su composición tiene una realcen directa con nuestro estilo de vida, de modo que a más actividad, más energéticas deben ser y al contrario. En todo caso, la fruta fresca y el agua son elementos básicos en una merienda saludable. Vale la pena planificar nuestras comidas durante la semana para conseguir una alimentación equilibrada. Todo es cuestión de ponerle imaginación y apostar por la vitalidad", ha zanjado la organización.