Frutas y verduras para retrasar la progresión de la ELA

Mercado de frutas y verduras en Andalucía
EUROPA PRESS
Actualizado: miércoles, 21 diciembre 2016 12:43

   MADRID, 7 Nov. (EUROPA PRESS) -

   Investigadores de la Escuela de Salud Pública de Mailman de la Universidad de Columbia (Estados Unidos) han revelado que el consumo de alimentos como frutas y verduras, que son ricos en antioxidantes y carotenoides, pueden asociarse a una mejor funcionalidad de los pacientes con esclerosis lateral amiotrófica (ELA), ralentizando la progresión de la enfermedad.

   Así se desprende de los resultados de un estudio publicado en la revista 'JAMA Neurology' que es de los primeros que analiza el impacto de la dieta en la evolución de esta enfermedad neurodegenerativa y demuestra que hay determinados nutrientes beneficiosos contra esta enfermedad.

   Este trastorno, también conocido como enfermedad de Lou Gehrig, causa atrofia, parálisis e insuficiencia respiratoria, lo que hace que la mediana de supervivencia desde el momento del diagnóstico oscile entre los 20 y 48 meses, si bien entre un 10-20 por ciento de los pacientes logra vivir durante más de 10 años.

   En este trabajo, los autores analizaron los hábitos nutricionales de 302 pacientes que llevaban al menos 18 meses con la enfermedad diagnosticada, para ver qué influencia podía tener en la gravedad de la enfermedad.

   De este modo, ha explicado Jeri Nieves, autor del estudio, han visto que la nutrición juega un papel clave tanto en el origen de la enfermedad como en su evolución, de ahí la necesidad de que "los pacientes coman alimentos ricos en antioxidantes y carótenos, así como fibra, pescado o aves de corral".

   Asimismo, los investigadores también encontraron que la leche y el embutido se asoció a una menor funcionalidad o una enfermedad más severa.

   Nieves reconoce que los alimentos y nutrientes que pueden ayudar a reducir la gravedad de la ELA son muy similares a las recomendaciones que se utilizan para prevenir muchas otras enfermedades crónicas, a la espera de poder concretar en futuros estudios qué alimentos ofrecen un mayor beneficio.