Asocian el consumo de bebidas energéticas durante la adolescencia al de alcohol o marihuana

Jóvenes bebiendo refrescos.
EUROPA PRESS
Actualizado: lunes, 6 octubre 2014 23:10


MADRID, 10 Mar. (EUROPA PRESS) -

Científicos de las universidades de Waterloo y Dalhousie, en Canadá, aseguran que el consumo de bebidas energéticas durante la adolescencia puede estar relacionado con una mala salud o el consumo de sustancias adictivas, al haber comprobado que también son más propensos a fumar marihuana o beber alcohol.

Además, los resultados de su estudio que publica la revista 'Preventive Medicine' muestran como el consumo de estas bebidas también es mayor entre los jóvenes propensos a la depresión, de ahí que los autores de la investigación propongan limitar el acceso de los jóvenes a estas bebidas.

"Aunque aún no está claro por qué existe esta relación, es preocupante dado que está aumentando el consumo entre los jóvenes, atraídos por los beneficios puntuales que les aportan", según ha reconocido Sunday Azagba, uno de los autores.

El estudio se basó en una encuesta a 8.210 estudiantes de secundaria de los que casi dos terceras partes aseguraban haber consumido este tipo de bebidas, al menos una vez en el último año. Y en el 20 por ciento de los casos, las habían bebido al menos una vez en el último mes. Además, los más jóvenes solían beberlas más.

Azagba reconoce que esto se debe a que las campañas de publicidad que utilizan las marcas de estas bebidas "parecen diseñadas a atraer su consumo entre los jóvenes".

Sin embargo, en el estudio han visto que su consumo fue mayor entre quienes además hacían uso de otras sustancias como el alcohol o la marihuana, lo que hace que se trate de una "combinación explosiva" ya que las bebidas energéticas se asocian a un mayor riesgo cardiovascular, deterioro del sueño, nerviosismo o náuseas por su alto contenido de cafeína.

"Si se tienen en cuenta los efectos negativos del consumo excesivo de cafeína, así como su uso asociado a otras sustancias nocivas, tenemos motivos para estar preocupados", ha aseverado Azagba, insistiendo además en la necesidad de "tomarse en serio" este problema y limitar su consumo a estas edades.