Los procesos de fertilidad, más fáciles de asumir para mujeres sin pareja masculina

Imagen de un laboratorio
ANTÓN MEDIA
Actualizado: miércoles, 17 junio 2015 10:56

   MADRID, 17 Jun. (EUROPA PRESS) -

   Las mujeres sin pareja masculina, tanto si viven solas como en pareja con otra mujer, afrontan mejor el proceso de donación de gametos masculinos para tener hijos que las parejas heterosexuales con infertilidad médica, según ha revelado un estudio realizado por la Clínia IVI de Barcelona.

   La investigación, presentada en la 31ª edición del Congreso de la Sociedad Europea de Reproducción Humana y Embriología (ESHRE) celebrada el pasado martes en Lisboa, ha sido dirigida por la psicóloga de IVI Barcelona, la doctora Diana Guerra, que ha asegurado que "estos resultados evidencian cómo las mujeres que acuden sin pareja masculina a la clínica tienen una mayor predisposición a revelar a sus hijos, familia y amigos la verdad sobre su concepción. También es este tipo de pacientes el que menos preocupaciones y miedos experimenta respecto a los vínculos genéticos con sus bebés".

   El estudio, que ha contado con una muestra de 400 participantes, refleja que el 40 por ciento de las parejas heterosexuales no pensaba contar a sus hijos que habían pasado por un proceso de donación de gametos. Este análisis también muestra la importancia de contar con asesoramiento psicológico durante el proceso, ya que tras ser visitados por un psicólogo, la mitad de las parejas heterosexuales afirmaban que sí revelarían a sus hijos su origen real.

   "Estos resultados reflejan el papel del psicólogo en los tratamientos de reproducción asistida, y principalmente en los procesos de donación de gametos, con el fin de facilitar la exploración de los pros y los contras de una acción y ayudarles así a normalizar su situación, en lugar de dar consejos o recomendaciones directas", ha afirmado la doctora Guerra.

   La falta de información es la causa principal de las preocupaciones y miedos acerca de la donación de gametos, sobre todo en los relativos a la salud personal, la procedencia y rasgos físicos y psicológicos del donante, la percepción de la familia y amigos ante el proceso y el temor a que el hijo no se parezca a los padres. Según este estudio, los pacientes que no recibieron apoyo psicológico mostraron mayores niveles de depresión, culpabilidad, miedo y ansiedad.