La testosterona no endurece las arterias en la aterosclerosis

Anciano, Viejo, Tercera Edad
EUROPA PRESS
Actualizado: miércoles, 12 agosto 2015 14:05

   MADRID, 12 Ago. (EUROPA PRESS) -

   La administración de testosterona no endurece las arterias, ni mejora la función sexual ni la calidad de vida en hombres mayores con aterosclerosis avanzada, según ha mostrado una investigación realizada por científicos del Brigham and Women's Hospital (Estados Unidos) y publicada en el 'Journal of the American Medical Association' ('JAMA').

   "Los resultados sugieren que la testosterona no debe ser utilizada de manera indiscriminada por los hombres. Nos parece que es poco probable obtener beneficios en la calidad de vida sexual de los hombres con bajos niveles de testosterona, principal razón por la que buscan terapias con esta hormona. Y, aunque descubrimos que no afecta al endurecimiento de las arterias, se necesitan datos a largo plazo para determinar los efectos que tiene en otros eventos cardiovasculares importantes", ha comentado el autor principal del trabajo, Shalender Bhasin.

   La testosterona, una hormona secretada principalmente por los testículos, desempeña un papel fundamental no sólo en los tejidos reproductivos masculinos, sino también en el crecimiento muscular, la masa ósea y el pelo del cuerpo. Cuando los hombres envejecen, sus niveles de testosterona bajan de forma natural.

   Estudios previos se han enfocado en examinar las tasas de eventos cardiovasculares que padecen los hombres que toman testosterona pero los resultados obtenidos han sido contradictorios. No obstante, sí que han mostrado el hecho de que la terapia con esta hormona podría aumentar el riesgo de padecer un ataque de corazón o derrame cerebral. En este sentido, la aterosclerosis es un factor de riesgo importante para este tipo de eventos cardiovasculares.

ESTUDIO REALIZADO DURANTE TRES AÑOS

   Por ello, los científicos analizaron durante tres años a 300 hombres mayores de 60 años con niveles de testosterona más bajos de lo normal. Además, midieron dos indicadores de la aterosclerosis: los depósitos de calcio en las arterias del corazón y el espesor del revestimiento interno de las arterias carótidas que suministran sangre al cerebro.

   Para medir los resultados secundarios de la función sexual y la calidad de vida, los investigadores pidieron a los participantes que completaran un cuestionario. Asimismo, tuvieron que aplicarse un gel con testosterona o placebo durante los tres años del estudio.

   "Muchos hombres, a medida que envejecen, experimentan una disminución de la testosterona, función sexual y vitalidad. Ante esto, hemos descubierto que tomando testosterona cuando los niveles están bajos no mejora la función ni la calidad de vida sexual", ha recalcado Bhasin.

   Finalmente, los científicos han destacado la necesidad de realizar más estudios para determinar la seguridad cardiovascular del uso de las terapias con esta hormona en los hombres mayores.