Los mayores que caminan y siguen dieta saludable tienen estancias hospitalarias más cortas

Having only poor appetite
Having only poor appetite - GETTY IMAGES/ISTOCKPHOTO / PHOTOGRAPHEE.EU
Publicado: jueves, 5 diciembre 2019 18:44

MADRID, 5 Dic. (EUROPA PRESS) -

Los adultos mayores que siguen una dieta saludable, caminan y realizan técnicas de reducción del estrés antes de una operación mayor tienen estancias hospitalarias más cortas y tienen más posibilidades de regresar a sus propios hogares tras la intervención que a otro centro. Además, así, también reduce los costes sanitarios, según los hallazgos de una investigación publicada en la revista 'Journal of the American College of Surgeons'.

El estudio evaluó un programa de 'rehabilitación preoperatoria' en el hogar, que los investigadores también denominan 'prehabilitación', para los beneficiarios del Medicare en el estado de Michigan (Estados Unidos), es decir, aquellos que tienen derecho al seguro médico financiado públicamente por el país norteamericano.

Estudios anteriores ya mostraron que la 'prehabilitación' reduce la tasa de complicaciones postoperatorias y acelera la vuelta del paciente a su rutina habitual, entre otras ventajas. "Este programa preoperatorio ha ido ganando impulso en los últimos 10 años. Cada vez más cirujanos y otros médicos están apreciando sus beneficios. Sin embargo, la viabilidad y el valor de la 'prehabilitación' fuera del entorno de investigación eran desconocidos", explica uno de los autores, Michael J. Englesbe.

Para este nuevo estudio, los investigadores probaron la eficacia y el ahorro de costes de la prehabilitación en el mundo real. Los pacientes se sometieron a diversas operaciones cardiotorácicas (pecho/corazón) y abdominales en 21 hospitales de Michigan que participaron en un programa estatal de 'prehabilitación'. Los cirujanos incluyeron a sus pacientes en este programa si estaban en alto riesgo de complicaciones postoperatorias.

La 'prehabilitación' incluyó un programa de andar en el hogar en el que los pacientes quirúrgicos realizaban un seguimiento de sus pasos utilizando un podómetro y recibían recordatorios y 'feedback' diarios a través del teléfono, correo electrónico o mensajes de texto. Los participantes recibieron materiales educativos sobre nutrición, técnicas de relajación y también sobre cómo dejar de fumar. También practicaron el uso de un espirómetro de incentivo, un dispositivo médico que ayuda a mantener los pulmones sanos después de una operación.

En el estudio se incluyeron 523 pacientes de Medicare que participaron en el programa durante al menos una semana antes de una operación hospitalaria entre 2014 y 2017. Para comparar, los investigadores usaron datos de Medicare durante el mismo período para identificar 1.046 controles emparejados: pacientes con características demográficas y enfermedades similares que se sometireon a la misma operación en el mismo hospital pero que no participaron en la prehabilitación. La edad media de los pacientes y los controles fue de 70 años.

La 'prehabilitación' se asoció significativamente con varias mejoras que son importantes para los pacientes, según los investigadores. Por ejemplo, la duración de la estancia hospitalaria fue menor en un día, con una mediana de seis días para los pacientes participantes frente a siete días para los controles, que no recibieron 'prehabilitación'. Los participantes del programa tenían más probabilidades de ser dados de alta del hospital directamente a su hogar: 65,6 por ciento contra 57 por ciento.

Medicare pagó casi 3.200 dólares (2.881 euros) menos en pagos totales tanto por atención hospitalaria como posthospitalaria para los pacientes que se sometieron a 'prehabilitación' que para los controles: 31.641 dólares (28.486 euros) frente a 34.837 dólares (31.364 euros). Los pagos de seguros fueron especialmente más bajos entre los pacientes en atención poshospitalaria, incluyendo el centro de enfermería especializada (847 frente a 1.410 euros) y la atención médica domiciliaria (746 frente a 864 euros).

"Todos los pacientes programados para una operación importante, no solo los de alto riesgo, deberían pedirle a su cirujano un programa de 'prehabilitación'", recomienda Englesbe. Aunque el estudio no evaluó la satisfacción del paciente con el programa, el investigador señala que los pacientes de su centro médico que completaron la 'prehabilitación' describieron su experiencia quirúrgica de manera muy positiva.