VIH, los 'agujeros' en el sistema inmunitario no se reparan a pesar de los fármacos

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Vih - NIAID, FLICKR CCBY2.0 - Archivo
Publicado: miércoles, 17 julio 2019 7:07

   MADRID, 17 Jul. (EUROPA PRESS) -

   Si no reciben terapia antirretroviral (TAR), la mayoría de los pacientes con VIH sufren un debilitamiento progresivo de su sistema inmunitario pero un porcentaje muy pequeño (0,3%) controla el virus de forma espontánea, sin tratamiento. Según un estudio publicado en 'Nature Immunology' realizado por investigadores del Centro de Investigación del Hospital de la Universidad de Montreal (CRCHUM), podría haber una explicación en parte en los conjuntos de genes expresados por los escasos glóbulos blancos que reconocen el VIH.

   Las células T CD4, que son clave para la coordinación de las respuestas inmunitarias, son importantes glóbulos blancos (linfocitos) que ayudan a controlar infecciones crónicas como el VIH. Pero en promedio, solo una célula de cada 1.000 en la población de células T CD4 puede reconocer el virus.

   "Determinamos exhaustivamente el conjunto completo de genes expresados por estas células raras de la sangre de personas con infección crónica por VIH en quienes el virus era abundante antes del tratamiento antirretroviral --señala Daniel Kaufmann, investigador de CRCHUM, especialista en enfermedades infecciosas--. Luego lo comparamos con las células de los controladores de VIH, las personas infectadas que controlan el virus en ausencia de terapia. Este tipo de enfoque poderoso, también denominado perfil transcripcional de todo el genoma, mide la actividad de miles de genes a la vez, lo que crea una imagen global de la función celular".

   Usando técnicas sofisticadas de análisis celular, el autor principal, Antigoni Morou, becario postdoctoral en el laboratorio de Kaufmann, identificó las principales diferencias funcionales entre los dos grupos de pacientes en el estudio. Los controladores de VIH tenían respuestas inmunes mucho más robustas, conocidas como Th17 y Th22, que son importantes para la defensa del tracto gastrointestinal, por ejemplo. Pero los pacientes con infección crónica con altos niveles de replicación viral mostraron linfocitos T CD4 desregulados dirigidos al VIH, y algunos de sus subconjuntos celulares mostraron signos de funcionamiento anormal.

   Continuando con su investigación, los científicos de CRCHUM se preguntaron si el ART provocaría una respuesta inmune similar a la que se encuentra en los controladores de VIH. "Realizamos un seguimiento de los pacientes con infección crónica después del control del virus por ART y verificamos si el tratamiento puede reparar su sistema inmunológico y permitirles tener células T CD4 con características similares a las de los controladores de VIH", señala Kaufmann, profesor en la Universidad de Montréal.

   El resultado fue de doble filo: algunos módulos de genes fueron sensibles al ART, mientras que otros se expresaron de manera muy diferente a los controladores de VIH.

   "Demostramos que el ART deja agujeros sin reparar en el muro de defensa del sistema inmunológico --explica Kaufmann--. Nuestros resultados sugieren que algunos de estos defectos de larga duración pueden contribuir a la falta de control viral una vez que se interrumpa la terapia antirretroviral. Ahora sabemos qué agujeros persisten en el sistema inmunológico. ¿Tenemos que rellenarlos? y, si es así, ¿cómo? Esta es otra pregunta científica".

   Allanar el camino hacia nuevas terapias que podrían complementar el tratamiento antirretroviral, el equipo de Kaufmann identificó características importantes de una respuesta inmune efectiva contra el VIH en comparación con una disfuncional y mostró cómo la respuesta puede verse afectada por el tratamiento antirretroviral.

   El siguiente paso será estudiar la programación subyacente de estas células T CD4 (epigenética) con la esperanza de desarrollar nuevas estrategias dirigidas para revertir la disfunción inmune y complementar el tratamiento antirretroviral. El laboratorio de Kaufmann ahora utiliza el mismo enfoque para evaluar a los candidatos para una vacuna contra el VIH.

   En 2017, casi 37 millones de personas vivían con el VIH. Cada día, 5.000 nuevas infecciones son reportadas a las autoridades sanitarias de todo el mundo.