Esperar que se produzcan efectos secundarios aumenta la posibilidad de que aparezcan

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FLICKR/ALAN LEVINE
Actualizado: miércoles, 21 diciembre 2016 13:46

   MADRID, 26 Ago. (EUROPA PRESS) -

   El número y la gravedad de los efectos secundarios con un fármaco aumentan por las expectativas y temores del propio paciente, según un estudio realizado en mujeres que reciben terapias hormonales, como el tamoxifeno, como parte de su tratamiento para el cáncer de mama.

   Un estudio en mujeres que reciben terapias hormonales, como el tamoxifeno, como parte de su tratamiento para el cáncer de mama se ha encontrado que el número y la gravedad de los efectos secundarios que experimentaron fueron influenciados por sus expectativas.

   El estudio, que se publica en la revista 'Annals of Oncology', ha descubierto que las mujeres que tenían altas expectativas de sufrir más y peores efectos secundarios antes de empezar su tratamiento comenzaron a tenerlos. De hecho, experimentaron casi el doble de efectos secundarios que las mujeres con expectativas positivas o que pensaban que los efectos no serían demasiado malos.

   Los investigadores dicen que sus hallazgos son importantes porque las mujeres pueden dejar de tomar su tratamiento hormonal adyuvante si experimentan demasiados efectos secundarios y peor calidad de vida. Esto, a su vez, puede afectar el éxito del tratamiento y la supervivencia.

   Pero sabiendo que las malas expectativas pueden aumentar el riesgo de experimentar efectos secundarios, el asesoramiento médico puede ayudar a reducir ese riesgo y, por lo tanto, mejorar la adherencia a la medicación.

   La profesora Yvonne Nestoriuc, del Departamento de Medicina Psicosomática y Psicoterapia en el Centro Médico de la Universidad de Hamburgo (Alemania) y directora del estudio apunta que estos resultados "muestran que las expectativas constituyen un factor clínicamente relevante que influye en el resultado a largo plazo de la terapia hormonal. Las expectativas pueden ser modificadas con el fin de disminuir la carga a largo plazo de efectos secundarios y optimizar la adherencia a los tratamientos preventivos contra el cáncer de mama en sobrevivientes de cáncer".

   La investigación se llevó a cabo en 111 mujeres que participaron en un ensayo clínico del Centro de Cáncer de mama de la Universidad de Marburg (Alemania), que habían sido sometidas a cirugía e iban a iniciar la terapia hormonal adyuvante con tamoxifeno o inhibidores de la aromatasa, como el exemestano.

   Los investigadores entrevistaron a las pacientes sobre sus expectativas sobre el efecto de la terapia hormonal adyuvante alinicio de la prueba, y luego evaluaron a los tres meses y a los dos años.

   Al inicio del ensayo nueve pacientes (8%) dijeron que esperaban que no hubiera efectos secundarios del tratamiento hormonal; 70 pacientes (63%) esperaban efectos secundarios leves, y 32 pacientes (29%) creían que tendrían efectos secundarios de moderados a graves.

   Después de tres meses, las pacientes que habían abandonado el ensayo (19) informaron de más efectos secundarios que las que permanecieron en el mismo (88). Las tasas de adherencia a los dos años fueron mayores en las mujeres con bajas expectativas de efectos secundarios antes de iniciar el tratamiento (87% de adhesión), que en las mujeres con altas expectativas de los efectos secundarios (69%).

    Unas expectativas más altas de efectos secundarios al inicio del estudio predijo un aumento del 1,8 en su aparición después de dos años y una la calidad de vida inferior en comparación con las mujeres con expectativas más benignas. Los investigadores ajustaron sus resultados para tener en cuenta factores que podrían afectar, como los sociodemográficos y médicos. Aun con estos ajustes los resultados siguieron apuntando en la misma dirección.

   Los efectos secundarios incluyen dolor en las articulaciones (71%), aumento de peso (53%) y sofocos (47%). Pero las mujeres también reportaron síntomas que no puedan ser atribuibles directamente a la medicación, como dolor de espalda (31%), problemas respiratorios (28%) y mareos (26%).

   "Esto corrobora la conclusión de que los mecanismos psicológicos tales como las expectativas negativas sobre el tratamiento juegan un papel significativo en la experiencia de los pacientes con cáncer de mama efectos secundarios --concluye la profesora Nestoriuc--. Mayores expectativas negativas, adoptadas por las pacientes antes del inicio de la terapia adyuvante, parecen tener una influencia destacada sobre la tolerabilidad a largo plazo, especialmente una vez que se confirman después de tres meses de tratamiento".

   La profesora Nestoriuc y sus colegas están llevando a cabo un ensayo controlado aleatorio para comprobar la eficacia de las estrategias para la mejora de las expectativas de las mujeres, que incluyen el asesoramiento de psicólogos o personal médico capacitado justo antes del inicio del tratamiento, así como durante el primer par de meses.