MADRID, 26 Ene. (EUROPA PRESS) -
Los buenos propósitos de realizar dieta y ejercicio para acabar con los kilos de más no siempre tienen su recompensa, aunque se cumplan estrictamente, debido a que hay zonas que no se movilizan porque son depósitos de grasa, según han explicado desde el equipo de Cirugía Plástica y Reparadora del Hospital Vithas Nuestra Señora de América, que recomiendan la liposucción "como única solución".
"La liposucción lo que hace es romper el adipocito (células grasas) y aspirar la grasa que hay dentro, de manera que el número de adipocitos disminuye", han explicado los expertos de Vithas. "Las células grasas se desarrollan durante la infancia y al crecer llegan a un número fijo que ya no se multiplica, pero sí pueden engordar y multiplicar su tamaño", ha añadido la doctora Teresa Távora.
Por esto, la liposucción elimina la grasa acumulada, pero también el número de adipocitos, por lo que "aunque se volviera a engordar, el número de adipocitos siempre será menor al que se tenía, de manera que aunque se vuelva a coger peso no se volverá a engordar de la misma forma", ha concretado la doctora.
La decisión de realizar una liposucción debe consultarse siempre con un especialista pero, "si tras varios fracasos con el cumplimiento de dietas observamos que esta puede ser la opción adecuado para reducir la grasa de forma localizada, la mejor época para planificar la intervención será entre el otoño y el invierno".
Távora ha explicado que tras la intervención hay que llevar una prenda de presoterapia durante varias semanas, "y siempre es preferible tomar la decisión durante el invierno y no antes del verano, que ya solemos llevar un tipo de ropa más ligera".
