MADRID, 30 Ago. (EUROPA PRESS) - Las enfermedades comórbidas y las complicaciones potencialmente modificables influyen considerablemente en los riesgos de la artroplastia total de cadera (ATC), esto es, la cirugía de prótesis de cadera, en personas de más de 90 años. Los pacientes de más de 90 años presentan mayores tasas de complicaciones y mortalidad tras una ATC que los más jóvenes. Sin embargo, aunque la edad es un factor importante, los riesgos asociados a la ATC en nonagenarios están relacionados en gran medida con el estado general de salud del paciente y su aptitud para la intervención, según la nueva investigación del doctor Vincent J. Leopold, y sus colegas del Hospital Universitario Charité de Berlín (Alemania).