El uso del ecógrafo en anestesiología permite hacer más técnicas con mayor tasa de éxitos y seguridad para el paciente

Doctor Andrés López
HM HOSPITALES
Actualizado: miércoles, 8 julio 2015 6:09

MADRID, 22 Jul. (EUROPA PRESS) -

La utilización del ecógrafo en anestesiología permite realizar un gran número de técnicas con mayor tasa de éxitos y seguridad para el paciente, según han asegurado diversos expertos durante la celebración del curso 'Nuevas Perspectivas de la Ecografía en Anestesiología', organizado por el jefe de servicio de Anestesiología de HM Hospitales, Andrés López, y el doctor Roberto Siljeström.

Y es que, según ha comentado López, la accesibilidad desde el punto de vista económico, unido a la portabilidad y la "excelente calidad" de imagen que proporcionan los nuevos equipos de ecografía, han permitido integrarlos de forma rutinaria en la práctica clínica diaria de esta especialidad

"Actualmente, son muchas las aplicaciones clínicas que tiene la ecografía dentro de nuestra práctica habitual, como anestesia de plexos, canalización de vías centrales y periféricas, bloqueos centrales, bloqueos interfasciales, estudio y abordaje de la vía aérea la valoración de la función cardiaca del paciente quirúrgico, drenaje de colecciones líquidas a nivel torácico o abdominal, valoración pulmonar en procesos infecciosos o 'distress' respiratorio y valoración del paciente en 'shock'", ha asegurado.

Asimismo, desde el punto de vista del anestesiólogo, la ecografía se utiliza fundamentalmente para la exploración y abordaje de plexos, exploración y localización de vías centrales y periféricas, exploración de columna para realización de bloqueos centrales, exploración del corazón, pulmón o vía aérea.

"Nos permite realizar un gran número de técnicas con mayor seguridad para el paciente y, en ocasiones, establecer un diagnóstico con más rapidez que si utilizásemos otro método diagnóstico", ha comentado el experto, para asegurar que, además, en situaciones de urgencia, permite descartar o descubrir patologías como un neumotórax intraoperatorio o postoperatorio, un derrame pleural, un derrame pericárdico y/o un taponamiento cardíaco, la existencia de líquido intraperitoneal o valorar la contractilidad miocárdica.

Finalmente, López ha informado de que las aplicaciones de la econografía son tantas que hasta hay quienes se refieren al ecógrafo como el "fenodoscopio del futuro". "El reto tecnológico es conseguir equipos de 'bolsillo', económicos con buena calidad de imagen y buenas prestaciones", ha zanjado.