Reducir las exacerbaciones en la EPOC mejora la calidad de vida de los pacientes

Actualizado: miércoles, 21 octubre 2015 18:42

MADRID, 21 Oct. (EUROPA PRESS) -

Reducir las exacerbaciones en la EPOC mejora la calidad de vida de los pacientes, según han asegurado diversos expertos en la primera edición del foro de discusión y debate intergeneracional 'Ágora', organizado por Novartis.

Allí, se han abordado temas como las comorbilidades de la EPOC, el control de la enfermedad y los últimos avances en el tratamiento de los síntomas de la misma, entre otros. "Son tiempos de cambio en el abordaje de la EPOC. El avance en el conocimiento de la enfermedad hace que las guías de práctica clínica estén cambiando hacia un enfoque más personalizado que tiene en cuenta diversas variables clínicas", ha comentado el director del encuentro y Neumólogo del Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla, José Luis López-Campos.

En este sentido, el especialista en Neumología del Hospital San Pedro de Alcántara de Cáceres, Juan Antonio Riesco Miranda, ha informado de que las comorbilidades más comunes en los pacientes con EPOC son las enfermedades cardiovasculares, el cáncer de pulmón, la ansiedad o depresión, la osteoporosis, el reflujo gastroesofágico o el síndrome de apneas-hipoapneas del sueño, que inciden directamente en el pronóstico de supervivencia y empeoran la calidad de vida de los pacientes.

Ante esta situación, prosigue el experto, es "importante" pensar en ellas, detectarlas precozmente y hacer una evaluación diagnóstica adecuada para proceder a un abordaje personalizado. Asimismo, el neumólogo del Hospital Arnau de Vilanova de Valencia, Juan José Soler, ha recordado que tener bien controlado a un paciente con EPOC supone que pueda convivir con una enfermedad que le genere el menor impacto clínico posible y que además, esta situación se mantenga estable a lo largo del tiempo.

DIFICULTADES PARA CONSEGUIR UN CONTROL ADECUADO

Sin embargo, avisa, existen algunas dificultades para alcanzar este estado óptimo como una comorbilidad asociada, una mala adherencia al tratamiento, la inactividad física o la presencia de síntomas y exacerbaciones. Estas últimas, según ha insistido, son periodos de inestabilidad clínica que tienen un fuerte impacto en la calidad de vida de los pacientes así como en sus relaciones sociales.

"Por ejemplo, es frecuente que los pacientes no quieran salir a pasear por el riesgo a resfriarse y descompensarse. Esta inactividad conduce a un empeoramiento progresivo y un sedentarismo que todavía produce más inconvenientes, con más síntomas, ansiedad, depresión, miedo a salir de casa e incluso afectación de las relaciones sociales", ha puntualizado Soler.

Dicho esto, ha destacado el papel de la doble broncodilatación ya que su administración ha demostrado reducir las exacerbaciones, aliviar los síntomas, mejorar la calidad de vida de los pacientes, aumentar la tolerancia al ejercicio y reducir la necesidad de medicación de rescate.

"El concepto de doble broncodilatación permite optimizar el tratamiento inhalador con broncodilatadores de distinta familia, y se ha comprobado su impacto favorable en la mayoría de los parámetros de función pulmonar, calidad de vida y reducción de las exacerbaciones. La doble broncodilatación ha supuesto un avance en el tratamiento de la EPOC, y ya se ha establecido como una opción terapéutica eficaz y segura", ha zanjado Riesco.