Los pacientes renales bien informados se decantan por la diálisis peritoneal

Actualizado: jueves, 15 octubre 2015 18:13

MADRID, 15 Oct. (EUROPA PRESS) -

Los pacientes renales que reciben información adecuada sobre los tratamientos disponibles optan por la diálisis peritoneal 7 veces más que los no informados, según ha mostrado un trabajo publicado en la revista 'Plos One' y en el que han participado 26 hospitales españoles.

"Este índice de elección demuestra que los pacientes suficiente y correctamente informados optan por la diálisis peritoneal domiciliaria en una proporción muy superior a la media nacional actual, que es sólo del 16,5 por ciento", ha comentado uno de los firmantes del artículo y doctor del departamento de Nefrología del Complejo Asistencial Universitario de León, Mario Prieto-Velasco.

Para alcanzar estos datos, los científicos analizaron a 1.000 pacientes a quienes dividieron en dos grupos, según pasaran o no por un proceso educativo estructurado con materiales específicamente desarrollados para facilitar su participación en la elección del tipo de tratamiento: trasplante, diálisis peritoneal domiciliaria, hemodiálisis en sala, hemodiálisis domiciliaria o tratamiento conservador.

"La diferencia en la proporción de pacientes que elige cada modalidad de tratamiento es muy diferente según reciban o no una adecuada educación para la toma de decisión, lo que demuestra la importancia de que este tipo de procesos se implanten en todos los hospitales para que los pacientes puedan elegir libremente, asesorados por los profesionales sanitarios, la modalidad que, en cada momento, mejor se adapte a su estilo de vida según sus condiciones personales, valores y preferencias", ha recordado el coautor del artículo y doctor del servicio de Nefrología del Hospital Universitario de Puerto Real (Cádiz), César Remón.

En concreto, el tratamiento sustitutivo renal tiene un "gran impacto" en la vida de pacientes y personas cercanas, tanto en cuanto a su calidad, como en la forma en la que desean vivirla, y puede llegar a provocar alteraciones en los aspectos laborales, familiares, sociales y personales.

LOS PACIENTES DEBEN PARTICIPAR "ACTIVAMENTE" EN LA ELECCIÓN DE TERAPIA

Por esta razón, a juicio de los expertos, es "importante" que los pacientes participen "activamente" en la elección de tratamiento, conociendo las repercusiones que cada modalidad tendrá sobre su situación personal, laboral, sus preferencias y, finalmente, en su calidad de vida.

De hecho, en el 'Manifiesto de personas con enfermedades renales', presentado recientemente por la Federación Nacional ALCER, los pacientes reclaman la necesidad de recibir información sobre todos los tratamientos sustitutivos renales disponibles para ejercer su derecho de libre elección y de mantener la máxima autonomía personal posible, así como la capacidad de decidir acerca de cómo vivir de acuerdo con sus propias preferencias.

"Es importante destacar que, tras haber pasado por el proceso educativo, la mayoría de los pacientes se ratifica en la opción elegida cuando finalmente inicia el tratamiento definitivo, lo que nos hace pensar que la educación facilita la toma de decisión y la hace más firme, incluso cuando el paciente, por su situación clínica, precisa iniciar el tratamiento de forma no programada o urgente", ha apuntado Prieto-Velasco.

De esta forma, otra de las conclusiones que se derivan de este trabajo es que es necesario que los pacientes reciban información y puedan elegir el tratamiento con tiempo suficiente para programar su entrada en diálisis aunque, si no fuera posible hacerlo de esa manera, es importante asegurarse de que los que inician de forma no programada también pasan por el proceso educativo, reciben información adecuada de todas las alternativas terapéuticas y sus repercusiones y pueden elegir la modalidad de tratamiento definitiva.

Además, dada la "enorme" carga presupuestaria que el tratamiento sustitutivo renal supone para el sistema sanitario, y debido a que el trasplante y la diálisis peritoneal consumen menos recursos, la puesta en marcha de este tipo de procesos educativos "no sólo beneficia a los pacientes por los excelentes resultados en salud" que estas modalidades proporcionan, sino que contribuye también a una "mayor sostenibilidad" del sistema sanitario.