Oncólogos y patólogos lanzan una guía para detectar una proteína que sobreexpresada hace más agresivo el cáncer de mama

Actualizado: miércoles, 13 mayo 2009 18:30

El uso incorrecto de estos test ha generado muchos "falsos positivos" en este tipo de tumores, con un alto coste para el sistema sanitario

MADRID, 13 May. (EUROPA PRESS) -

La Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) y la Sociedad Española de Anatomía Patológica (SEAP) ha lanzado hoy una guía para la correcta detección en el cáncer de mama, de una proteína (HER2) que, sobreexpresada, hace que el tumor sea más agresivo y responda peor a la quimioterapia, que acompañada por terapias biológicas anti-HER2 mejora las tasas de supervivencia de estos pacientes.

Este documento, firmado por 17 expertos pero elaborado con las recomendaciones de cientos de especialistas en cáncer, fija una serie de directrices sobre cómo realizar el test que detecta en un tumor el exceso de HER2, una prueba que ya se realiza de forma rutinaria en los hospitales de España pero que, hasta este momento, no contaba con criterios homologados a nivel nacional para su práctica.

En concreto, las directrices de esta guía, que serán presentadas en el Congreso Anual de la SEAP que se celebrará en Sevilla entre los próximos días 20 y 23 de mayo, explican a los profesionales sanitarios qué muestras deben tomarse para realizar este test, en qué momento extraerlas, con qué técnicas, qué sustancias utilizar, cómo analizar los resultados y cómo comunicárselos al oncólogo.

Los encargados de adelantar hoy en Madrid los contenidos del documento fueron los doctores Ramón Colomer, presidente de la SEOM; José Palacios, jefe del Servicio de Anatomía Patológica del Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla; y Joan Albanell, jefe del Servicio de Oncología Médica del Hospital del Mar de Barcelona.

Según explicó el doctor Albanell, el problema de estos test hasta ahora era que, por la ausencia de estándares y lo complicado de la técnica, su aplicación daba "un alto índice de falsos positivos" que, si bien no acarreaban consecuencias negativas para la salud de las pacientes mal diagnosticadas, sí les generaba la molestia de tener que acudir al hospital y unos elevados costes sanitarios sistema, ya que el tratamiento anual con esta terapia cuesta unos 40.000 euros.

BENEFICIAR EN 2010 A UNAS 17.000 MUJERES

"Hace un par de años, se creía que la incidencia de la sobreexpresión del HER2 en el cáncer de mama era de un 30 por ciento. Incluso había expertos que aseguraban que, en su hospital, el 80 por ciento de los tumores de mama presentaban un exceso de esta proteína. Hoy sabemos que existía un sobrediagnóstico y que sólo tendrían este factor entre el 18 y el 20 por ciento de los casos", explicó.

Para el doctor Palacios, aplicar "de forma correcta" estos test logrará reducir estos "falsos positivos" y beneficiará, para 2010, "no sólo a las 3.500 mujeres que podrían desarrollar este tipo de cáncer de mama, sino a las 17.000 que tendrán otra clase de tumores de mama y que podrán ser ahora correctamente diagnosticadas".

Este experto calcula que cerca de un 10 por ciento de hospitales españoles podrían tener problemas para la correcta detección del HER2, sobre todo los hospitales más pequeños con este test, que se tarda en realizar entre seis horas y un día y cuesta unos 150 euros.

TERAPIA ANTI-HER2, EFICAZ EN TODAS LAS FASES

Según el doctor Albanell, para tratar a una paciente con cáncer de mama de la forma más adecuada posible, lo primero es averiguar si su tumor tiene un exceso de la proteína HER2, circunstancia que se da "en uno de cada cuatro" casos y ofrece la oportunidad de usar, en cualquier estadío, terapias biológicas específicas contra el HER2.

El uso de una terapia anti-HER2 en pacientes que sobreexpresan esta proteína consigue, con seguridad y sin generar graves efectos secundarios, "ser eficaz en casi todas las fases del cáncer". "En mujeres con metástasis, añadir el fármaco a la quimioterapia ha demostrado mejorar la eficacia del tratamiento", indicó

El uso de este medicamento, durante un año y unido a la quimioterapia, en mujeres recién operadas de un cáncer de mama puede llegar "a reducir a la mitad" el riesgo de recaída. "Incluso en mujeres que no han podido ser operadas, el fármaco anti-HER2 puede utilizarse para reducir el tamaño del tumor y operarlo", concluyó.