¿Miden los hospitales españoles los péptidos natriuréticos?

Análisis de sangre
PIXABAY
Actualizado: lunes, 26 octubre 2015 16:49

   MADRID, 26 Oct. (EUROPA PRESS) -

   Solo el 65 por ciento de los hospitales españoles tiene disponible para pacientes que acuden al servicio de urgencias la medición de la concentración de péptidos natriuréticos (PN), clave para el diagnóstico, pronóstico y tratamiento de la insuficiencia cardiaca.

   Así se desprende de una encuesta elaborada por la Sociedad Española de Cardiología (SEC) en 107 hospitales públicos que abarcan una población de más de 31 millones de habitantes, que también indica que únicamente el 66 por ciento de la población puede acceder a esta prueba.

   La SEC, junto a la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI), la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (semFYC) y la Sociedad Española de Medicina de Urgencia (SEMES), han elaborado un documento de consenso sobre el uso de los péptidos natriuréticos en el ámbito de la práctica clínica.

   Los péptidos natriuréticos son un mecanismo de protección del propio corazón, que a mayor estrés y sobreesfuerzo produce en mayor medida esta sustancia, que tiene efectos beneficiosos para el sistema cardiovascular: vasodilatación, diuresis y bloqueo del sistema simpático y la angiotensina, entre otros.

   Su análisis se incorporó al diagnóstico de los pacientes con insuficiencia cardiaca en 2001, pero no fue hasta 2012 cuando las guías incluyeron concentraciones de referencia y establecieron su recomendación con el máximo nivel de evidencia para la evaluación diagnóstica y pronóstica de estos pacientes.

   El objetivo de este documento de consenso es establecer recomendaciones precisas "para un uso apropiado en la práctica clínica y en sus diferentes escenarios", según ha destacado Domingo Pascual, coordinador de esta iniciativa.

   En urgencias se recomienda la medición de las concentraciones de péptidos natriuréticos en todos los pacientes que presentan disnea y en los que existe sospecha de insuficiencia cardiaca 'de novo', es decir, que no han sido diagnosticados con anterioridad.

EL SOBREESFUERZO DEL CORAZÓN, BAJO CONTROL

   Ante una situación de sobreesfuerzo en la que aumenta la presión interna del corazón, los cardiomiocitos producen en mayor cantidad una prohormona (proBNP) que se separa en dos sustancias distintas: la hormona en sí misma (BNP) y una porción amino-terminal (NT-proBNP).

   La medición de ambas sustancias (BNP y NT-proBNP) permite identificar la presencia de insuficiencia cardiaca y "medir el grado de la misma", ha explicado Pascual, por lo que "se trata de un sistema de defensa hormonal cuya cuantificación tiene un indudable valor diagnóstico y pronóstico".

   Además de ayudar en el diagnóstico, debe interpretarse como un dato pronóstico, es decir, como una señal de alarma para aquellos pacientes ya diagnosticados de insuficiencia cardiaca ya que, a mayor concentración, mayor riesgo de complicaciones y peor evolución clínica.

   El documento también concluye que es necesaria una formación previa en cuanto a la interpretación de los datos y su integración en la práctica clínica, un uso razonado de la herramienta siempre que esta permita facilitar la toma de decisiones en cuanto al diagnóstico, pronóstico y tratamiento del paciente, y la inclusión de su uso en protocolos consensuados por los diferentes especialistas médicos.

   "También es importante recalcar que la importancia de este marcador es tal que debe siempre reflejarse en las historias y en los informes clínicos ya que a otro profesional que pueda ver al paciente en un futuro le va a ayudar este valor", ha destacado.