Investigación demanda más apoyo a los cuidadores de padres con enfermedades mentales

La intervención en la administración de antibióticos mejora la infección respiratoria aguda, según un estudio
La intervención en la administración de antibióticos mejora la infección respiratoria aguda, según un estudio - PIXABAY
Publicado: lunes, 15 julio 2019 11:13

MADRID, 15 Jul. (EUROPA PRESS) -

Investigadores de la Universidad de East Anglia (EEUU) subrayan la necesidad de brindar un mayor apoyo a aquellos jóvenes que ejercen como cuidadores de padres con una enfermedad mental.

El estudio ha sido publicado en la revista 'Advances in Mental Health' y ha incluido entrevistas con 20 personas de todo el Reino Unido, de entre 19 y 54 años de edad, que habían cuidado o seguían cuidando a sus padres, explorando la relación con sus padres y sus oncsecuencias en la vida adulta.

"Brindar atención a un padre no es, en sí mismo, perjudicial para un niño; de hecho, puede ser una experiencia positiva, una expresión de amor y una cosa de la que estar orgulloso. Sin embargo, puede ser perjudicial si el nivel de atención proporcionado y la función y las responsabilidades atribuidas al niño van más allá de lo que podría esperarse razonablemente. Si el niño asume un papel adulto más allá de sus años de desarrollo, puede impactar negativamente en sus propias necesidades, habilidades de afrontamiento y resiliencia ", ha explicado la doctora Kate Blake-Holmes, directora del estudio y profesora de trabajo social.

"Si bien algunos individuos sacaron fuerzas de su adversidad, este estudio sugiere que la adultez emergente puede ser más compleja para los cuidadores adultos jóvenes y que pueden 'crecer rápido' en ciertas áreas, mientras que su crecimiento emocional y psicológico podría haberse retrasado en otras", ha añadido.

Entre los resultados obtenidos, se observaban retos en la eduación y el empleo, las relaciones interpersonales, la toma de decisiones o el convertirse en padres. Algunas de las consecuencias eran la decisión de dejar la universidad para dedicarse al cuidado de los padres, la negativa a tener hijos, el miedo a desarrollar una enfermedad mental y la dificultad en las relaciones interpersonales y afectivas.

Si bien todos los pacientes hablaron de experiencias negativas, también hablaron de la enfermedad de sus padres como una oportunidad para obtener habilidades y fortalezas específicas.

"Necesitamos presionar para que se realicen estas evaluaciones y para tener conversaciones con los jóvenes. Debemos incluir a los jóvenes cuidadores en la toma de decisiones y reuniones sobre sus padres. Ellos son los que viven con ellos y responden a las crisis, sin embargo, existe el temor de discutir temas con jóvenes cuidadores porque los servicios lo consideran inadecuado", ha expresado la doctora.

"Se trata de apoyar a estos niños, que están haciendo un trabajo increíble, dándoles la confianza para hablar sobre sus necesidades y pedir ayuda, pero también para ayudarlos a lograr sus propios objetivos" ha finalizado.