Dudas sobre el uso de la fisioterapia en Parkinson

Fisioterapia
KATARZYNABIALASIEWICZ
Actualizado: lunes, 25 enero 2016 7:35

   MADRID, 25 Ene. (EUROPA PRESS) -

   Una nueva investigación de la Universidad de Birmingham, en Inglaterra, ha demostrado que la fisioterapia y la terapia ocupacional no producen mejoras en la calidad de vida para los pacientes con enfermedad de Parkinson de leve a moderada. Los resultados del ensayo 'PD REHAB' muestran que combinar la fisioterapia y la terapia ocupacional no tiene un impacto positivo en "actividades de la vida diaria", como ponerse la ropa o lavarse los dientes, en el inmediato y mediano plazo.

   El equipo detrás de la investigación, publicada en 'JAMA Neurology', creen que muestra la necesidad de la reasignación de recursos hacia tratamientos más eficaces para los pacientes. La enfermedad de Parkinson es un trastorno degenerativo del sistema nervioso central, que afecta a unos siete millones de personas en todo el mundo y el 4 por ciento de los mayores de 80 años.

   Las directrices nacionales actuales señalan que los pacientes deben tener acceso a ambos tipos de terapia, aunque hay una inconsistencia geográfica de atención disponible en Reino Unido. El profesor Carl Clarke, de la Universidad de Birmingham, dice: "Esto demuestra que hay una necesidad urgente de revisar las directrices actuales para los pacientes con enfermedad de Parkinson. El recurso que se ha comprometido a estas terapias, que no parecen ser eficaces, podría emplearse mejor en pacientes de Parkinson con problemas más graves".

   "Dicho esto, es probable que el aumento de la actividad física sea beneficiosa para los pacientes con principios de Parkinson, bien a través de clases de baile o usando algunas de las tecnologías emergentes interactivas que están en estudio. El gran desafío es incorporar ese comportamiento a largo plazo y fomentar más ejercicio durante un largo periodo de tiempo", añade.

   Se reclutó para este análisis un total 762 pacientes con enfermedad de Parkinson de leve a moderada de 37 centros en todo Reino Unido y se siguieron durante 15 meses. Este estudio fue un ensayo controlado aleatorio, que es una de las mejores maneras para determinar si un tratamiento en realidad tiene el efecto deseado.

   El profesor Clarke, que también trabaja en 'Sandwell and West Birmingham Hospitals NHS Trust', subraya: "Es difícil abogar por la eliminación de algo en las directrices que se supone que es beneficioso. Aunque estas terapias puedan proporcionar mejoras marginales a la función motora, tal vez un centímetro extra en su paso, no conducen a beneficios en la calidad de vida día a día".

   El equipo, que han publicado previamente ensayos a gran escala sobre la eficacia de las terapias farmacológicas (ensayo PD MED) y quirúrgicas (ensayo SURG PD) para la enfermedad de Parkinson, ahora están tratando de investigar las terapias de expresión y del lenguaje disponibles (ensayo PD COMM).