Los británicos donan más en España que en Reino Unido

Rafael Matesanz
EUROPA PRESS
Actualizado: lunes, 10 agosto 2015 12:57

   MADRID, 10 Ago. (EUROPA PRESS) -

   Los británicos son más propensos a aceptar la donación de órganos de un familiar fallecido cuando están en España, según ha asegurado el director de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), Rafael Matesanz, ya que el porcentaje de negativas familiares es tres veces menor al registrado en Reino Unido.

   En una entrevista a Radio Nacional, recogida por Europa Press, Matesanz ha explicado que España cuenta con el porcentaje de negativas familiares más bajo del mundo, con apenas un 16 por ciento de todos los contactos que se llevan a cabo para donar los órganos de un paciente cuando fallece.

   En otros países como Reino Unido el porcentaje de negativas es mucho mayor y ronda el 40 por ciento, pero los datos de los pacientes británicos que han fallecido en España muestran como la negativa familiar es de solo un 9 por ciento.

   "Los ingleses donan más en España que en Reino Unido. Eso demuestra que el sistema funciona mucho mejor y que los coordinadores hacen su trabajo de forma profesional", ha defendido el director de la ONT, que no cree que haya diferencias culturales entre unos países y otros y atribuye las diferencias a una cuestión organizativa.

   De hecho, ha añadido, el porcentaje de donantes de otros países en España está entre un 8-10%, que es el peso de la población inmigrante. "Los inmigrantes en España están donando al mismo nivel que los españoles, y eso está rompiendo muchos tabús porque muchos vienen de lugares donde la donación no existe. Cuando se les explica de forma adecuada, funciona", ha añadido.

   Matesanz ha explicado que la clave está en la entrevista que se realiza a los familiares del donante, para lo que España cuenta con "verdaderos especialistas". No obstante, reconoce que dentro del territorio nacional también hay diferencias, y el equipo más experto es el de Alicante, donde apenas tienen un 5 por ciento de negativas.

   "Todo está protocolizado, hay que saber qué decir y no decir, como afrontar la relación con la familia, y los que tienen más experiencia dicen que lo más importante es escuchar. La familia tiene una fase de duelo que es normal pero, si se sabe escuchar y consolar, al final es la propia familia la que acaba ofreciendo la donación. Pese a ello, siempre va a haber un porcentaje que van a reaccionar con una negativa", ha explicado.

LOS OBJETIVOS DE 2020, PARA 2015

   Por otro lado, el director de la ONT se ha mostrado optimista y confía en llegar este año a los 40 donantes por millón de habitantes, unas cifras que inicialmente estaban previstas para el año 2020, lo que va a permitir "salvar a unas 300-400 personas más de las que trasplantamos el año pasado".

   Además, ha recordado que el trasplante se ha convertido en una intervención eficaz a largo plazo, ya que hace que el beneficiado tenga entre un 70-75 por ciento de probabilidades de seguir con el órgano funcionando después de 10 años.

   "Son cifras espectaculares, y esto hace que haya personas en España que lleven más de 40 años con un riñón trasplantado, o más de 25 con un hígado o corazón. No hablamos de terapias para salvar unos años, sino para toda la vida", ha defendido.

7 BUENOS SAMARITANOS DE MÁS DE 200 SOLICITUDES

   Matesanz también ha resaltado la figura del buen samaritano en el trasplante de riñón, ya que permite que una persona sana done uno de sus órganos a otra que lo necesita a la que "no va a conocer en la vida, sólo porque le interesa que mejore su salud".

   "Es un ejemplo que la sociedad debe reconocer y aplaudir, porque toca lo más hondo. Alguien entiende que ante un familiar se done un riñón, pero a un tercero es absolutamente impresionante", según el director de la ONT, que recuerda que en los últimos años han recibido más de 200 ofertas de las que 7 han culminado en un trasplante ya que buscan ser "muy garantistas" y comprobar que no hay riesgos para el donante o el receptor.

   Así, se comprueba que el donante no tenga la tensión alta, no sea diabético ni tenga antecedentes familiares de diabetes, y que no tenga obesidad, ya que todos ellos son factores que pueden predisponer a la insuficiencia renal.

   "Lo primero que hacemos es una exploración médica para descartar esos factores, y luego que no haya ningún tipo de interés, para lo que existe la condición de conocerse donante y receptor. Vemos también que su estado psicológico es el correcto, y sólo si se pasan estos filtros finalmente pueden donar ese órgano", ha explicado.