El 64% de la población desconoce la posibilidad de hacer un testamento vital

Actualizado: miércoles, 13 junio 2012 21:02

MADRID, 13 Jun. (EUROPA PRESS) -

El 64 por ciento de la población desconoce la posibilidad de hacer un testamento vital. Y es que, aunque el 84,5 por ciento lo considera útil y a sólo al 10 por ciento le incomoda pensar y hablar de la muerte, solamente un 6 por ciento recibe esta información por parte del personal sanitario, un 22,3 por ciento a través de los medios de comunicación y un 7,5 por ciento por amigos y familiares.

Estos datos corresponden a un estudio realizado en Cataluña, en el que han participado 264 personas con una edad media de 53 años y que han pasado por el centro de salud desde noviembre del 2011 hasta enero del 2012. Además, se han presentado en el 32º Congreso de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC), que este miércoles se inaugura en Bilbao y al que acuden más de 3.000 profesionales de Atención Primaria de toda España.

Según comentan las autoras de esta experiencia, Irene Alcalá y Olga Bigas, el testamento vital siendo desconocido por la mayoría de la población, a pesar de ser un derecho fundamentado en el principio de autonomía. A su juicio, hay una "falta de información" adecuada dirigida a los ciudadanos.

En este sentido, la presidenta del Comité organizador del Congreso, Susana Martín, recuerda que aunque el gran desarrollo legislativo se produce a partir del año 2000 con la Ley Básica de la Autonomía del Paciente y de los Derechos y Obligaciones en materia de información y documentación clínica, actualmente "son pocos" los estudios sobre los conocimientos y actitudes del personal sanitario acerca de esto.

"En la difusión de esta información los medios de comunicación juegan un papel fundamental, tal y como se ha visto en este trabajo. En general, los médicos tenemos una actitud positiva hacia la utilización y utilidad de este documento y la postura del paciente también es favorable. Sin embargo, este sentimiento positivo contrasta con los datos de que menos de un 25 por ciento de los adultos completan el documento. Podemos decir que sí existe una predisposición a cumplimentar su voluntad anticipada, pero no en un futuro cercano", recalca Martín.

Asimismo, el estudio refleja que son pocos los profesionales sanitarios que inician las conversaciones con los ciudadanos sobre la planificación anticipada de cuidados al final de la vida. En este sentido, según ha afirmado Martín, los médicos conocen "poco" sobre la normativa, el contenido y el registro de este documento. Por ello, aboga por buscar otras alternativas a las consultas de Atención Primaria para que los pacientes puedan informarse, a través del personal de enfermería, de los trabajadores sociales o auxiliares.

RELACIÓN MÉDICO-PACIENTE

Asimismo, los expertos son conscientes de que el testamento vital sólo es eficaz cuando existe una relación estrecha entre el médico y el paciente. En este sentido, la presidenta del Comité Organizador reconoce que a la mayor parte de las personas les cuesta hablar de la muerte, especialmente cuando es la suya propia, aunque lamenta que la falta de tiempo que hay en las consultas dificulta además que se plantee el tema porque "existe el miedo de molestar al paciente".

En este sentido, el estudio refleja que la mayoría de las personas consideraban que deberían recibir esta información después de una entrevista en la que se les explicaba --con la ayuda de un tríptico-- los aspectos fundamentales y las herramientas para el acceso del testamento vital.

Además, en la segunda parte del trabajo sobre personal sanitario, destaca que el 34 por ciento ha sido consultado alguna vez sobre este aspecto y que les resulta difícil informar por desconocimiento propio y falta de tiempo. "Nos parece interesante que aunque sólo el 10 por ciento de los pacientes encuestados refiere incomodidad para hablar del tema, el 46 por ciento del personal sanitario cree que para éstos sí lo es. Es decir, el paciente no pregunta por no saber de su existencia, y el personal sanitario no lo ofrece por desconocimiento y falsas creencias respecto a los pacientes", comentan las autoras.

Lo cierto es que, tal y como se pone de manifiesto en esta experiencia, existe un desconocimiento generalizado sobre este tema ya que un 75,5 por ciento de los pacientes ignora si tiene validez legal; un 70,2 por ciento no sabe algunos de los aspectos que aspectos incluye y más del 80 por ciento desconoce sin son necesarios testigos, representante legal y notario.

Además, un 83.4 por ciento considera que todas las personas deberían recibir información. "Actualmente nos seguimos sintiendo más cómodos comunicando este tipo de decisiones de manera verbal a la familia, en lugar de hacerlo por escrito. Existe todavía una cierta preferencia en dejar las decisiones en manos de familiares y médicos", argumenta Martín.

Por último, el estudio refleja también que los conocimientos y la predisposición a plantearse la realización del testamento vital o recomendarlo es mayor en personas con estudios secundarios o superiores. "Nuestra opinión respecto a estas diferencias es que podría deberse a que las personas con estudios, en general, tienen más herramientas a la hora de buscar información o de estar al día", señalan las autoras.

Por últimas, estas investigadores reconocen que les ha sorprendido el hecho de que la edad no influye demasiado al igual que haber sufrido una enfermedad grave o la de un familiar, que podría mostrar una mayor sensibilidad o conocimiento sobre estos temas. No obstante, reconocen que esto último no lo han podido demostrar en el trabajo.