El retraso en la edad de maternidad eleva la incidencia de casos de cáncer durante el embarazo

Actualizado: miércoles, 22 marzo 2006 22:30


PAMPLONA, 22 Mar. (EUROPA PRESS) -

La edad de maternidad es un factor determinante para la posibilidad de que una madre sufra un cáncer durante un embarazo. Así lo confirma el doctor Guillermo López, director del departamento de Obstetricia y Ginecología de la Clínica Universitaria de Navarra, quien reconoce "afortunadamente, la frecuencia del cáncer asociada al embarazo no es muy alta".

López destacó que el cáncer suele ser una enfermedad que aparece en edades un poco más avanzadas que la que tiene una mujer cuando se queda embarazada, "sin embargo, en los últimos años ha habido unas modificaciones demográficas y sociales que conllevan algunas variaciones". Precisó así que la edad en la que la incidencia de tumores empieza a subir se sitúa entre los 30 y los 35 años, por lo que "es lógico que haya aumentado la asociación de cáncer y embarazo".

El doctor Guillermo López preside el comité científico y organizador del 'Symposium internacional sobre cáncer y embarazo' que se celebrará mañana y el viernes en la Clínica Universitaria, que analizará todo lo relacionado con la enfermedad.

En cualquier caso, la probabilidad de cáncer durante el embarazo en mujeres, según datos de la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO) es de uno cada entre 1.500 y 10.000 embarazos.

Asimismo, aproximadamente, el 13% de los cánceres en la mujer ocurren durante la época reproductiva. Los porcentajes de curación de cáncer durante el embarazo son prácticamente los mismos que se obtienen en el cáncer no asociado al embarazo", aseveró el especialista.

INCIDENCIA

En cuanto a la incidencia, los datos que se manejan son muy variados dado que "la experiencia es muy limitada", incide el médico de la Clínica Universitaria de Navarra. En cualquier caso, por orden de incidencia estimada, el más frecuente sería el melanoma (un caso cada entre 1.000 a 5.000 mujeres embarazos); seguido del de mama (uno cada 3.000); el cuello de útero y los linfomas (uno cada 2.000); y el de útero (uno cada 2000/10.000). También se recogen casos de cáncer de colon y recto, sarcomas de hueso y partes blandas, así como de tiroides asociado al embarazo.

UN TRATAMIENTO INDIVIDUALIZADO

Según el experto, "el tratamiento, en cualquier caso, de cáncer asociado al embarazo debe ser individualizado". Manifestó que "están mejorando los resultados por mejor tratamiento con quimioterapia y cirugía". La radioterapia, por su parte, está contraindicada durante el embarazo.

La quimioterapia se puede aplicar a partir de la fase de embriogénesis (pasadas 10 - 12 semanas) para que se realice sin riesgos importantes de anomalías congénitas, aunque sin olvidar que sí puede producir un retraso en el crecimiento intrauterino. Es precisamente en la quimioterapia en donde se centran principalmente los avances: "Con el estudio de la biología de los tumores se están consiguiendo tratamientos más efectivos", expone.

Además, el uso de taxanos para casos de cáncer de mama y ovario ha mejorado el pronóstico de la enfermedad, así como el uso de nuevos fármacos, tales como la herceptina, que mejora la supervivencia en casos seleccionados de cáncer de mama y embarazo.

Con todo, el doctor López mantiene la esperanza de que "en un futuro no muy lejano, el conocimiento de la biología de los tumores ayude a establecer tratamientos muy personalizados", con la consiguiente mejora para el paciente. En cualquier caso, lo que "no se ha comprobado" para aumentar la eficacia de curación de según qué cáncer, argumenta el director del departamento de Obstetricia y Ginecología de la CUN, es que "el aborto mejore el pronóstico de la enfermedad".