BILBAO, 28 Ene. (EUROPA PRESS) -
La incidencia de la gripe en el País Vasco se ha situado en la última semana en 317 casos por 100.000 habitantes, 23 menos que en la semana precedente. El colectivo más afectado es el de menores de 14 años, según los datos hechos públicos por el Departamento vasco de Salud.
En función de los datos recogidos por la Red de Médicos, en la cuarta semana del año la actividad gripal descendió "ligeramente" al pasar de una tasa de incidencia de 340 casos por cada cien mil personas en la tercera semana a los 317 casos por 100.000 habitantes de los últimos siete días.
Los grupos de 0 a 4 años y de 5 a 14 años son los que han resultado más afectados, con una tasa de 1.563 y 715 casos por 100.000 habitantes, respectivamente. Otro de los grupos de edad que ha visto aumentar sus casos es el de 65 a 74 años, con 163 casos por cien mil personas.
Los análisis que realizan semanalmente los profesionales pertenecientes a la Red de Médicos Vigía, una red que se activa anualmente para la vigilancia de la gripe estacional y que está compuesta por 38 médicos de Medicina General y 11 pediatras, siguen confirmando "una alta detección viral", con aislamientos en su totalidad del virus tipo A.
Las consultas atendidas en Atención Primaria por síndrome gripal han descendido un 7% con respecto a la semana anterior, hasta situarse en 4.687 consultas.
La mayor tasa se registró en Guipúzcoa con 227 casos, seguida de Álava, con 216 casos, y Vizcaya, con 208 casos por cada 100.000 habitantes.
PROTEGERSE ANTE LA TOS Y EL ESTORNUDO
El Departamento de Salud y Osakidetza recomiendan, que en caso de necesitar atención sanitaria por un proceso gripal, se acuda al médico de familia y se sigan sus indicaciones.
Según han recordado, la gripe es una enfermedad vírica, por lo que no está indicado tratarla con antibióticos. Se trata de una enfermedad "molesta, pero benigna en la población sana" y que no tiene tratamiento específico.
Reposo, beber abundantes líquidos y tomar antitérmicos para atajar la fiebre son las principales recomendaciones ante esta afección, aunque, en el caso de que la fiebre persista, es necesario consultar con el médico.
Teniendo en cuenta su alto índice de transmisión y contagio, es importante adoptar medidas higiénicas como protegerse frente a la tos y el estornudo, lavarse frecuentemente las manos o utilizar pañuelos desechables.
