PSOE cree que la decisión del TSJM supone "un varapalo formidable" y pide diálogo al nuevo consejero de Sanidad

Trinidad Jiménez, PSOE
EUROPA PRESS/PSOE
Actualizado: martes, 7 octubre 2014 2:05

MADRID, 28 Ene. (EUROPA PRESS) -

La responsable de Política Social del PSOE, Trinidad Jiménez, considera que la decisión del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) de frenar la privatización de seis hospitales madrileños supone "un varapalo formidable" para todas las iniciativas que ha puesto en marcha la Comunidad de Madrid en materia sanitaria, como el copago por ejemplo, y es por ello por lo que ha pedido "diálogo" al nuevo consejero de Sanidad madrileño.

"Madrid puso en marcha este proceso sin contar con nadie, sin presentar memorias económicas, sin transparencia y además, echando a los profesionales a la calle. Hay un problema de fondo porque cada día la Comunidad de Madrid invierte menos dinero a la sanidad, lo que obliga a muchos profesionales a irse a la calle y que evidentemente se produzca un deterioro en su calidad", ha subrayado en declaraciones a los medios.

A juicio de la exministra de Sanidad socialista, la Comunidad de Madrid tiene que volver al punto inicial donde empezó, sentarse con los partidos políticos y conseguir defender "algo tan básico como un servicio público esencial", como la sanidad, además de no tomar más decisiones que "pongan en riesgo el sistema".

Sobre la renuncia del ya exconsejero de Sanidad de Madrid, Javier Fernández-Lasquetty, Trinidad Jiménez considera que era "insostenible" que se mantuviera en su puesto después de las decisiones que ha tomado en la Comunidad y que han echado para atrás los tribunales.

"La responsabilidad política tiene que ir más allá y González es el máximo responsable de la Comunidad de Madrid y quien ordenaba este tipo de decisiones. A partir de ahí tienen que hacer una reflexión de cómo están gobernando", ha insistido.

Con todo ello, Jiménez califica de "gran éxito colectivo" la sentencia del TSJM, en la que cree que ha influido la presión y movilización de los profesionales sanitarios, de los ciudadanos madrileños, de sindicatos y partidos políticos.

Es más, cree que se trata de "un signo" frente a otros intentos "privatizadores" de la Sanidad en la Castilla-La Mancha, La Rioja, o la Comunidad Valenciana.