Presentan el primer Documento de Consenso sobre el Dolor Irruptivo Oncológico

Actualizado: martes, 14 junio 2011 16:54

Ya existen fármacos para paliar estos "picos de dolor muy intenso"

MADRID, 14 Jun. (EUROPA PRESS) -

Los expertos en Oncología reunidos esta semana, en Madrid, en el 16 Congreso de la Sociedad Española de Oncología Radioterápica (SEOR) han presentado el primer Documento de Consenso sobre el Dolor Irruptivo Oncológico (DIE).

El DIE es un tipo de dolor característico, que se define como un "pico de dolor muy intenso", que aparece de forma intensa (por encima de 7, siendo la máxima 10 y teniendo como referencia la Escala Visual Analógica -EVA-) y aunque el dolor de base "esté controlado", explica la jefa del Servicio de Oncología Radioterápica del Hospital Universitario La Paz, Ana Mañas.

"No es un empeoramiento del dolor crónico, sino que es una crisis, un pico, un ataque de dolor", añade la oncóloga médica del Hospital Gregorio Marañón y coordinadora del documento de consenso, Yolanda Escobar, quien explica que es un tipo de dolor "difícil de acotar y difícil de diagnosticar".

Este documento de consenso, elaborado por la Sociedad Española de Oncología Radioterápica (SEOR), la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), la Sociedad Española de Dolor y la Sociedad Española de Cuidados Paliativos, viene a suplir esta carencia y a ayudar a los profesionales sanitarios en las decisiones de su práctica clínica diaria.

Y es que en el momento de "debut del tumor el 30 por ciento de los pacientes sufre crisis de dolor", una cifra que va creciendo durante todo el proceso de evolución de la enfermedad y que en la "fase final afecta al 80 por ciento de los pacientes", concreta Escobar.

FÁRMACOS QUE SE ADAPTAN "COMO UN GUANTE"

Sin embargo, a pesar de estas cifras y, aunque como recuerda Mañas es "el síntoma más temido por todos", suele tardar en tratarse, pese a que actualmente se disponen de fármacos de acción rápida, que "se adaptan como un guante" a este tipo de episodios.

Normalmente los DIES son episodios de dolor "muy rápidos", que se establecen en periodos muy cortos -de 3 o 4 minutos- y que suelen durar "alrededor de una hora", especifica Escobar. "Los tratamientos clásicos tardaban en hacer efecto y casi comenzaban a hacerlo cuando la crisis había terminado, pero ahora contamos con fármacos adecuados para su tratamiento que actúan prácticamente de forma inmediata", indica Escobar.

Por eso es importante "fomentar" la comunicación médico-paciente para detectar cuanto antes estos ataques, que "empeoran notoriamente" la calidad de vida del paciente y afectan a sus relaciones sociales, familiares e incluso su inserción laboral, ya que pueden "aparecer de forma espontánea, en cualquier momento y en cualquier lugar".

En este sentido, la presidenta del Grupo Español de Pacientes con Cáncer (GEPAC), Begoña Barragán, apunta que los datos preliminares de la encuesta que han puesto en marcha como consecuencia de la aparición de este primer consenso indican que "el 36 por ciento de los pacientes creen que el dolor es normal y que tienen que vivir con él".

Además, el 89 por ciento de los participantes reconoce haber sufrido un episodio de este tipo, el 54 por ciento manifiesta estar "muy preocupado" por el dolor y el 71 por ciento asegura que es la "causa principal" de pérdida de su calidad de vida.

Pese a ello, estos datos demuestran que el paciente "no tiene suficiente información" para solicitar tratamiento para el dolor, lo que en opinión de Barragán se confirma si se tiene en cuenta que "el 80 por ciento no ofrece reticencia a tomar opiáceos". "Es una asignatura pendiente para profesionales sanitarios y asociaciones", concluye la presidente de GEPAC.