Las personas que viven solas tienen el doble de riesgo de enfermedad cardiaca grave

Actualizado: jueves, 13 julio 2006 19:14


MADRID, 13 Jul. (EUROPA PRESS) -

Las personas que viven solas tienen el doble de riesgo de enfermedad cardiaca grave, como la angina y el ataque cardiaco, que aquellos que viven con otra persona, según un estudio del Hospital Universitario Aarhus Sigues (Dinamarca) que se publica en la revista 'Journal of Epidemiology and Community Health'. El descubrimiento está basado en un estudio de más de 138.000 adultos de entre 30 y 69 años que viven solos en un área de Dinamarca.

Entre 2000 y 2002, 646 personas fueron diagnosticadas con angina grave, sufrieron un ataque cardiaco o fallecieron por muerte cardiaca súbita, una variedad de trastornos conocidos como síndrome coronario agudo.

Cuando se analizaron estos casos en detalle utilizando información de los registros de población, el poseer una educación escasa y vivir en una pensión se asociaron con un mayor riesgo del síndrome. Pero los dos factores de riesgo más importantes del síndrome eran la edad y vivir en soledad.

En la población total, las mujeres de más de 60 años que viven en solitario suponen más del 5 por ciento y los hombres solos de más de 50 años constituyen el 8 por ciento.

A pesar de ello las mujeres solas de este grupo de edad suponen una tercera parte de las muertes derivadas del síndrome dentro de los 30 días siguientes a su diagnóstico, mientras que los hombres de este grupo dan lugar a las dos terceras partes de la mortalidad.

Los riesgos más bajos incluyen compartir la casa con alguien, un alto nivel educativo y estar trabajando. Las mujeres divorciadas también poseen un menor riesgo de padecer el síndrome coronario agudo.

Los autores señalan que ciertos factores de riesgo tienden a ser más comunes en el estilo de vida de aquellos que viven solos, lo que podría ayudar a explicar las diferencias. Estos factores de riesgo incluyen el tabaquismo, la obesidad, el colesterol alto y menos visitas al médico de familia. Además, las personas que viven solas podrían ser menos capaces de aprovechar las redes de apoyo social.

(EUROPA PRESS SALUD)