MADRID, 7 Mar. (EUROPA PRESS) -
El doctor Carlos Morín, acusado de haber realizado abortos ilegales en su clínica Emece de Barcelona, recientemente negó ante al juez las acusaciones que pesan contra él y aseguró que la cifra de 4.000 euros que supuestamente pidió a la periodista danesa, que simulaba ser una paciente, por realizarle un aborto es, en realidad, "la traducción aproximada a moneda española de la interrupción del embarazo en Estados Unidos", según la declaración que realizó ante el juez del caso y a la que ha tenido acceso Europa Press.
Según declaró en el juicio que se está celebrando en Barcelona el doctor Morín, no hubo ninguna persona en la clínica que pidiera a la reportera de la televisión danesa, que afirmó ser una paciente, "la cuantía de 4.000 euros", ya que, según afirmó, "a esa persona nunca se le ha tratado como paciente por lo que se le ha informado siempre a nivel de consulta en caso hipotético".
El médico, de origen peruano, aseguró que "cuando vino la periodista, sospechaba que simulaba su condición", pero "a pesar de dicha sospecha la periodista siguió realizando todos los exámenes previos psiquiátricos que suelen ser usuales en la clínica", señaló.
También aseguró el médico en su declaración que el reportaje de la televisión danesa no refleja las dos ocasiones en que la periodista mantuvo entrevistas con el psiquiatra que trabaja para la clínica. Morín afirmó que "el caso de la periodista danesa fue rechazado por informe psiquiátrico que especificaba 'simulación'".
Carlos Morín señaló que el 95 por ciento de los abortos que se realizan en la clínica obedecen a razones psiquiátricas, y lo justificó porque, en su opinión, "cuando se legisló sobre la materia la causa más abundante eran los motivos psiquiátricos".
Morín explicó que en la clínica el supuesto de aborto por "factor psiquiátrico" supone la causa del 99% de los abortos, y afirmó que en "un 5% aproximadamente" de los casos se rechaza la intervención "por no ser indicada", mientras que "en otro 5% se rechaza por fabulación en la descripción de episodios por violencia de género".
Carlos Morín se ha enfrentado con las autoridades en varias ocasiones. En noviembre de 2005, la Consejería de Salud de Palma de Mallorca ordenó el cierre de la clínica Emece de la Isla (clínica perteneciente al mismo conglomerado al que pertenecen Ginemedex o Emece Barcelona), porque el médico que efectuaba los abortos no era ginecólogo, aunque a las pocas semanas la clínica se reabrió.
