La mitad de las infecciones por alimentos en mal estado se producen en verano y en el hogar

Actualizado: domingo, 22 julio 2007 12:47


BARCELONA, 22 Jul. (EUROPA PRESS) -

La mitad de las toxiinfecciones por el consumo de alimentos se producen entre los meses junio y agosto, sobre todo en el ámbito del hogar, por lo que los expertos recomendaron extremar al máximo la buena conservación de salsas, huevos y derivados.

La Asociación Española de Fabricantes de Salsas y Condimentos Preparados remarcó que si bien la población es consciente de que en verano debe beber más agua para evitar la deshidratación y proteger la piel del sol, "muchas veces nos olvidamos de las precauciones que hay que extremar el consumo de alimentos".

La entidad argumentó que de junio a agosto se concentran más del 50% de los brotes de enfermedad transmitidas por alimentos, debido sobre todo a la conservación a temperaturas inadecuadas y a una manipulación incorrecta. Destacó que en esta época es necesario incrementar la precaución con los productos elaborados con huevo duro, como mayonesa, alioli, salsa cocktail o salsa holandesa.

La asociación remarcó que la salsa envasada es la opción más segura porque está elaborado con huevo pasteurizado, hecho que minimiza los riesgos de toxiinfecciones. En este sentido, subrayó que entre los meses de mayo y agosto agrupan el 40% de las ventas de mayonesa y salsa fina.

Por su parte, el Instituto Silestone un organismo dedicado al estudio y divulgación de la higiene en la cocina, indicó que más del 50% de las toxiinfecciones alimentarias se producen en el hogar. Alertó de que el verano es la época más propicia para el desarrollo de la salmonela, por lo que es necesario incrementar la manipulación y conservación de alimentos.

RECOMENDACIONES.

Para evitar estas infecciones, el Instituto Silestone aconsejó examinar el aspecto externo del producto fijándonos en que la etiqueta contenga información referente a los ingredientes, condiciones de conservación y fecha de caducidad.

Es importante no romper la cadena del frío, ya que a temperatura ambiente las bacterias se multiplican, y no mezclar alimentos crudos con precocinados para evitar la posible transmisión de microorganismos. Es mejor cocinar los alimentos mediante tratamientos prolongados a altas temperaturas porque es el método de higienización más eficaz.