Llevar una dieta equilibrada y exponerse 30 minutos al sol con factor de protección evita el déficit de vitamina D

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Actualizado: miércoles, 8 agosto 2012 13:49

MADRID, 8 Ago. (EUROPA PRESS) -

La Fundación Española del Corazón (FEC) ha asegurado que la realización de una dieta equilibrada y la exposición al sol durante treinta minutos con factor de protección, ayuda a prevenir el déficit de vitamina D en el organismo.

Y es que, los estudios epidemiológicos realizados hasta el momento demuestran la existencia de una asociación entre niveles bajos de vitamina D y una mayor prevalencia de factores de riesgo cardiovascular como la hipertensión arterial y la diabetes, factores que pueden llegar a provocar algunas enfermedades cardiovasculares como el infarto o la angina de pecho.

En concreto, el estudio estadounidense 'Health Professionals Follow-up Study', revela que el riesgo de infarto se multiplica por dos en aquellas personas que tienen valores de vitamina D inferiores a 15 nanogramos por mililitro.

La vitamina D es una vitamina liposoluble, es decir que se almacena en el tejido graso del cuerpo, y su función principal es la de ayudar al organismo a absorber el calcio necesario para, junto con el fósforo, formar nuestros huesos. Además, se produce principalmente mediante la exposición de nuestra piel a los rayos solares UV, por este motivo también se la conoce popularmente como "la vitamina de la luz del sol".

En este sentido, el miembro de la sección de Riesgo Vascular y Rehabilitación Cardiaca de la Sociedad Española de Cardiología (SEC), Regina Dalmau, ha comentado que cuando se expone el cuerpo a la radiación solar se produce una "reacción química" que transforma el colesterol o ergosterol --propio de los vegetales-- en vitamina D activa efectiva.

Por este motivo, ha proseguido el experto, los países que gozan de más cantidad de horas de sol poseen unos niveles más altos de Vitamina D. Asimismo, este especialista ha recordado que existen "muchos alimentos" que contienen vitamina D de forma natural, como los pescados grasos, el marisco, el huevo, o de forma enriquecida como algunos productos lácteos, cereales o zumos.

No obstante, la vitamina D sufre dos transformaciones en el organismo: "la primera sucede en el hígado y da lugar al calcidiol. La segunda tiene lugar en los riñones y otros tejidos y produce calcitriol, una hormona activa que estimula la absorción del calcio, algunos fosfatos y regula la transcripción de diferentes genes". Además, también participa en la síntesis de la insulina y en la contracción cardiaca, regula el sistema inmunitario y tiene poder antimicrobiano.

"Son necesarias más investigaciones para confirmar estos hallazgos, lo que sí podemos evidenciar científicamente a través de estudios epidemiológicos que se han realizado hasta el momento, es que la gente que posee un déficit de vitamina D en sangre tiene más enfermedades cardiovasculares, lo que no implica que exista una relación de causalidad entre ambas circunstancias, ya que dicha asociación puede deberse a que bajos niveles de vitamina D estén asociados a otras situaciones que sí se convierten en factores de riesgo reales, como una dieta poco cardiosaludable o la falta de ejercicio físico", ha zanjado a experta.