Una joven con triple obesidad mórbida y 190 kilos reduce su peso a la mitad 10 meses después de operarse

Actualizado: martes, 14 noviembre 2006 13:55

La joven, que llegó a tener un índice de masa corporal de 84, tiene ya una esperanza de vida normal

MADRID, 14 Nov. (EUROPA PRESS) -

La joven Raquel V.P., de 21 años, que fue operada el pasado 9 de enero de triple obesidad mórbida cuando pesaba 190 kilos (con una altura de 1,50 metros), ha conseguido rebajar su peso hasta los 95 kilogramos diez meses después de la intervención, según informaron a Europa Press fuentes del Centro de Cirugía Avanzada del Hospital Virgen de la Paloma de Madrid, donde tuvo lugar la operación.

Como primer efecto, la de peso ha permitido a Raquel, que llegó a tener un índice de masa corporal de 84 (se considera que hay obesidad a partir de 30), pasar de tener una esperanza de vida de tan sólo 5 años a una normal.

La operación se realizó en el citado Centro de Cirugía Avanzada en una sola intervención a través de laparoscopia (cirugía mínimamente invasiva), y consistió en la reducción de estómago, y limitación de una parte del intestino. Durante todo el pasado año sólo se operaron uno o dos pacientes en España con este tipo de obesidad.

Tras solicitar ayuda en un programa de televisión por la falta de recursos económicos, Raquel V.P, de 21 años, fue intervenida de forma gratuita, siendo dada de alta una semana después de la operación. En un principio, su caso fue estudiado por el equipo de Cirugía Digestiva del Centro para analizar los riesgos, y posteriormente fue intervenida con la técnica del baipás gástrico proximal.

La paciente tenía un Indice de Masa Corporal (ICM) de 84, "lo que suponía una barbaridad, ya que a partir de un valor de 40 se considera obesidad mórbida", según los médicos del centro. Además, este sobrepeso le hacía enfrentarse a una esperanza de vida de sólo cinco años, por el "enorme" riesgo de patologías asociadas como la insuficiencia cardiaca y otras afecciones respiratorias.

REDUCCIÓN DEL ESTÓMAGO A UNA DÉCIMA PARTE.

La paciente tuvo que ingresar una semana antes para someterse a una dieta hídrica y perder unos 20 kilos antes de la operación (de 4 horas de duración), que en este caso y particularmente se pudo realizar en una sola vez. Así, se redujo el estómago por laparoscopia (pasando de una capacidad de 500 centímetros cúbicos a una de entre 30 y 50) y se continuó con el baipás (unión con el intestino) para la mala absorción intestinal.

Como consecuencia del baipás (que se suele hacer a los seis meses desde la primera intervención), se deja operativo sólo una parte del intestino, reduciendo la absorción, con lo que el paciente consigue reducir el peso de forma paulatina. Diez días después de la intervención, Raquel había perdido 8 kilogramos.

Los médicos destacan que la pérdida de peso conlleva la normalización de la hipercolesterolemia y la hipertensión, así como menos dolores articulares y respiratorios que "que suponen una mejora en su calidad de vida".