Identifican un gen que permite al cerebro anticipar el momento de la comida

Actualizado: martes, 24 octubre 2006 17:30


MADRID, 24 Oct. (EUROPA PRESS) -

Investigadores de la Universidad de Friburgo (Suiza) y la Universidad Louis Pasteur/CNRS (Francia) han identificado un gen crítico, el Period 2, que permite al cerebro anticipar el momento de la comida. Este gen es un componente clave del sistema de mantenimiento del reloj circadiano del organismo. Las conclusiones del estudio se publican en la revista 'Current Biology'.

Los expertos explican que un horario programado diario es una potente señal temporal que puede reiniciar los tiempos fisiológicos de la mayoría de los órganos, incluyendo el hígado. En términos de la conducta animal, una comida diaria programada provoca movimientos anticipatorios de actividad locomotora y cambios en la temperatura del organismo. Se cree que estas conductas anticipatorias se encuentran bajo el control de un mecanismo para la comida que puede adiestrarse, es decir, un mecanismo temporal dentro del cuerpo que se fija por el consumo de comida cuyos mecanismos moleculares aún se desconocen.

Los investigadores han descubierto la primera evidencia de que una única mutación genética puede volver a los ratones por completo incapaces de predecir el momento en el que pueden acceder a la comida. Los científicos descubrieron que esta carencia de anticipación de la comida tanto a nivel conductual como fisiológico está asociada específicamente con una mutación en el gen Period 2, un gen que, según han mostrado trabajos anteriores, juega un importante papel en la capacidad del cerebro para hacer funcionar su reloj circadiano central de acuerdo a la luz del día.

Los investigadores descubrieron que la sincronización de los tiempos entre los órganos establecida por las comidas programadas no se ve afectada por la mutación de Period 2, lo que indica que este gen no es crucial para que la disponibilidad programada de comida afecte a la coordinación fisiológica de tejidos exteriores al sistema nervioso central.

Según sus autores, el trabajo proporciona una herramienta para investigar el mecanismo de relojería cerebral responsable de la predicción de las comidas y con ello descubrir las áreas del cerebro que participan en la anticipación de la alimentación. Los investigadores esperan que esto permita el estudio de cómo estas áreas interactúan con otras regiones del cerebro responsables de otros tipos de conducta como el aprendizaje, la memoria y la sensación de placer.

Los expertos esperan que estos conocimientos sobre la fisiología de los tiempos de alimentación sirvan para mejorar las terapias que contrarrestan los trastornos que tienen su origen en alteraciones del sistema circadiano como los problemas del sueño, los trastornos de la alimentación, la obesidad y la depresión.