Un estudio relaciona la dificultad de conciliar el sueño en las personas mayores con un mayor deterioro cognitivo

Anciano.
EUROPA PRESS
Actualizado: domingo, 8 enero 2012 11:15

Aboga por que futuros trabajos analicen si este factor puede tenerse en cuenta para predecir un mayor deterioro cognitivo a esas edades

SEVILLA, 8 Ene. (EUROPA PRESS) -

Las quejas que manifiestan las personas mayores relativas a su calidad y conciliación del sueño "podrían influir" en su capacidad de aprendizaje y memoria, según revela el estudio 'Influencia de las quejas subjetivas de sueño sobre variables cognitivas en una muestra de personas mayores', que recoge el libro de ponencias del '53 Congreso de la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología', que se ha celebrado en Andalucía.

Este estudio, al que ha tenido acceso Europa Press, parte de la premisa de que los criterios biológicos del sueño, "en especial una reducción del tiempo del sueño", parecen estar asociados "con un empeoramiento cognitivo a lo largo del ciclo vital".

No obstante, los autores de esta investigación, de la Fundación INGEMA de Donostia, admiten que "no está claro" si los parámetros subjetivos del sueño están relacionados con un decremento de las funciones cognitivas en la vejez, siendo además "pocos" los estudios al respecto.

Por ello, su estudio se ha centrado en analizar si los factores subjetivos del sueño "muestran una relación significativa" con el funcionamiento cognitivo en una muestra de personas mayores. Para tal fin, el presente trabajo analizó a 84 personas, con una media de edad de 70 años.

En concreto, estas personas fueron evaluadas con un cuestionario sobre calidad subjetiva del sueño, extraído del Estudio Longitudinal Envejecer en España (ELES), y una serie de pruebas integradas en el 'The Cambridge Neuropsychological Test Automated Battery' (CANTAB), como son el Aprendizaje de Pares Asociados (PAL) para memoria visual y aprendizje, y el cambio de Set Intra y Extra-dimensional (IED) para medir el cambio y flexibilidad de la atención.

Además, se dividió la muestra en dos grupos. Uno compuesto por personas que no manifestaban mostrar dificultades (o al menos solo de forma ocasional) relacionadas con la conciliación o mantenimiento del sueño; y un segundo grupo de personas que declaraban tener dificultad varios, la mayoría o todos los días.

Una vez analizadas las diferencias de medias para el funcionamiento cognitivo entre de los dos grupos descritos, los especialistas extrajeron entre sus principales resultados el que el grupo con menos dificultades de sueño "mostraba significativamente menos errores en la prueba del aprendizaje de pares asociados", además de que "necesitaba de un menor promedio de ensayos para completar dicha prueba correctamente". Por contra, no se hallaron diferencias significativas para las puntuaciones del IED.

A la vista de estos resultados, los autores del mismo sugieren que "las quejas percibidas por las personas mayores relativas a su sueño podrían influir en su capacidad de aprendizaje y memoria". Por este motivo, instan además a que futuros estudios "deberán determinar si puede constituirse como un factor a tener en cuenta para predecir un mayor deterioro cognitivo en la edad avanzada".