Estimular los sentidos de los bebés beneficia su desarrollo emocional

Bebé, baño
BART HEIRD/ FLICKR
Actualizado: miércoles, 27 mayo 2015 14:15


MADRID, 27 May. (EUROPA PRESS) -

Una recopilación reciente de estudios clínicos ha puesto de manifiesto que la estimulación multisensorial -estimulaciones táctiles, olfativas, auditivas y visuales- aporta beneficios al desarrollo social, emocional, cognitivo y físico de los bebés, por lo que esta es fundamental en las primeras etapas del desarrollo, ya que en los tres primeros años de vida se produce el 85 por ciento del desarrollo neuronal que favorece la comunicación, la comprensión, el desarrollo social y el bienestar emocional.

De hecho, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el cerebro de un bebé crea hasta 1,8 millones de nuevas conexiones sinápticas por segundo, y son las propias experiencias del bebé las que determinarán qué sinapsis se conservarán.

"En este desarrollo neuronal, que se produce por estas sinapsis o conexiones entre neuronas que dan lugar a la conformación cerebral, influye de manera significativa el entorno en el que niño crece", ha asegurado psicóloga infantil, Silvia Álava.

Como resultado, lo que el bebé siente, ve, oye y huele, contribuye al desarrollo cerebral, por lo que para un crecimiento y desarrollo feliz y saludable, los bebés necesitan atención, sensibilidad y estimulación, ha añadido la psicóloga.

Por todo ello, Johnson's ha querido sentar las bases sobre la importancia de la estimulación sensorial en el desarrollo feliz y saludable de los bebés, a través de su campaña global 'Johnson's es mucho más', que tiene como objetivo que los padres sigan unos rituales diarios, como el baño, ya que se ha demostrado que son oportunidades ideales que los padres deben aprovechar para estimular los sentidos del bebé, y contribuir así en su desarrollo e incrementar su capacidad de aprendizaje.

En este sentido los resultados de la encuesta global de Johnson's sobre la importancia de la estimulación multisensorial de los bebés a través del baño, ha revelado que el 84 por ciento de los padres dice que la hora del baño es el mejor tiempo y de mayor calidad que pasan sus hijos; mientras que el 42 por ciento ha reconocido que el baño es sumamente importante para el desarrollo cerebral de sus bebés.

BENEFICIOS DEL RITUAL DEL BAÑO

El ritual del baño es un momento íntimo entre padres e hijos con el que se crea un vínculo afectivo y una conexión, ya que proporciona un contacto directo piel con piel, establece contacto ocular directo, permite oír la voz de los padres y reconocer olores familiares.

Muchos padres piensan que cuando los niños son recién nacidos no tienen los sentidos completamente desarrollados, pero esto no es así, ya que los sentidos los van desarrollando cuando aún están en el vientre materno. "Un recién nacido tiene los sentidos mucho más desarrollados de lo que pensamos", ha asegurado la neonatóloga del Hospital Universitario La Paz de Madrid, Susana Ares.

Además, la exposición inicial y continuada de los bebés a las diferentes texturas, visiones, sonidos y olores proporciona oportunidades únicas para estimular los sentidos táctil, olfativo, visual y auditivo de los bebés y generar recuerdos duraderos y múltiples conexiones neuronales, según ha señalado la Silvia Álava.

En este contexto, el tacto es el sentido mejor desarrollado de los bebés en el momento del nacimiento y, de hecho, la OMS recomienda proporcionar contacto piel con piel a partir del nacimiento ya que influye de manera positiva en muchas áreas del desarrollo de los bebés. Por ello, la doctora Ares ha afirmado que a los niños recién nacidos no se les debe poner manoplas, pues esto impide el contacto piel con piel.

Por otro lado el presidente de la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria (SEPEAP), el doctor Venancio Martínez, ha insistido en que el baño debería ser una tarea diaria y que los padres siempre deben de hacerlo con las manos al descubierto para que se produzca el contacto de piel con piel.

Además ha destacado que el baño debe durar aproximadamente cinco minutos, se haga con agua no demasiado caliente -entre 32 y 34 grados-, y que se tenga cuidado al secar al bebé, pues hay que hacerlo muy bien en las zonas donde haya pliegues en la piel y con una toalla suave.

Por último, Álava ha señalado que el baño a última hora de la tarde tiene grandes beneficios para el niño porque ese estado de relajación que el baño le proporciona, ayuda a que la calidad del sueño sea mejor.