Dos de cada tres enfermos de asma grave no controlado mejoran con el tratamiento con 'Xolair' (Novartis)

Actualizado: martes, 22 mayo 2007 13:33


SAN FRANCISCO, 22 May. (EUROPA PRESS/Ulises Fuente) -

Dos de cada tres afectados por asma grave no controlado han mostrado una mejoría total o parcial de los síntomas cuando han sido tratados con omlizumab, una terapia biológica comercializada en España por Novartis como 'Xolair', según un estudio que apunta al anticuerpo IgE como especialmente indicado para el tratamiento del asma grave, con el resultado incluso de muerte, pero que, en cualquier caso provoca severas limitaciones en la actividad diaria de los enfermos.

En España, el 18 por ciento de lo asmáticos padece de asma grave, casi medio millón de personas, una dolencia que, pese a administrarse tratamiento broncodilatador y antiinflamatorio, "no es fácil de controlar", según Juan Verea, jefe del servicio de Neumología del Hospital Juan Canalejo (A Coruña), que ha asistido a la edición anual del congreso especializado en enfermedades de las vías respiratorias American Thoracic Society, celebrado en San Francisco.

"No obstante, la llegada de este fármaco ha supuesto que en dos de cada tres pacientes consigan una mejoría total o parcial", señaló Verea, que apuntó que, entre las ventajas de este tratamiento, se incluyen la reducción de los "elevados riesgos" de los efectos secundarios de la administración de cortisona oral. En este sentido, explicó que los pacientes a los que estos avances pueden ayudar "son un pequeño colectivo pero que visita frecuentemente al médico y a los hospitales".

Entre los efectos adversos de los corticoides, según Verea, se cuentan la osteoporosis o las cataratas y las manchas en la piel, para cantidades muy elevadas, por lo que, según dijo, es recomendable combinar este tratamiento con otro, de forma que s puedan reducir las dosis de corticoides.

En cuanto a las técnicas para el tratamiento del asma severo, apuntó que se pueden añadir como la "más racional" las terapias por medio de termoplastia, que, por medio de una catéter "calientan el músculo liso de las vías respiratorias", si bien estas técnicas, al igual que otros tratamientos por inhalación no generan beneficios inmediatos, sino a largo plazo, por lo que redundan en una falta de adherencia la tratamiento por parte de los pacientes, que prefieren los inhaladores broncodilatadores que solventan los síntomas a corto plazo.

"Tenemos un grave problema de adherencia al tratamiento entre los asmáticos", afirmó Verea, que apuntó a que el tratamiento de omalizumab reduce los síntomas del asma "en lugar de pretender el tratamiento cuando ya se ha producido la respuesta inflamatoria alérgica".

Verea explicó que el asma debe ser interpretado como un "conflicto de intereses" entre los genes de un individuo y el medio ambiente, y señaló que las explicaciones de la dolencia se pueden encontrar en genes y cromosomas localizados, lo que en cambio se contradice con el aumento de, la prevalencia del asma en las sociedades occidentales, lo que, a su juicio, indica que hay que introducir otro componente, que puede ser el medio ambiente, la contaminación y la presencia dela obesidad, a lo que no habría que descarta un presencia vírica.

Cuando las personas con asma alérgica entran en contacto con una sustancia a la que son sensibles, como los ácaros del polvo doméstico o el pelo de animales, se establece un mecanismo mediante el cual el organismo produce grandes cantidades de una molécula 'anticuerpo' denominada inmunoglobulina E (IgE). Un exceso de IgE puede ocasionar un daño grave al desencadenar los síntomas de asma alérgica (dificultad respiratoria o disnea, sibilancias y tos). Al interrumpir la acción de la IgE, 'Xolair' se dirige específicamente a la causa básica de las crisis de asma alérgica.

Al contrario que con el asma moderado o leve, el caso de asma grave "puede ocasionar crisis que incluso conlleven el fallecimiento del paciente. Algunos enfermos con síntomas intensos responden peor al tratamiento antiasmático habitual, lo que conlleva una mayor morbilidad y pero calidad de vida, sgún el facultativo, que añade que, de esta manera, "presentan más riesgo de sufrir crisis asmáticas graves, hospitalización o inluso muerte" a causa del asma.