Cuando las secreciones de un paciente por ébola se secan el virus "tiende a desaparecer"

Actualizado: viernes, 3 julio 2015 2:37


MADRID, 9 Oct. (EUROPA PRESS) -

El vicepresidente de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas (SEIMC), Rafael Cantón Moreno, asegura que el virus del ébola puede sobrevivir aproximadamente dos días en las secreciones de un paciente infectado, pero "lo más probable" es que sequen antes por lo que el virus "tiende a desaparecer".

Así lo ha reconocido este experto en declaraciones a Europa Press, tras conocerse que este jueves se han desinfectado el domicilio y el espacio del Hospital Fundación Alcorcón de Madrid donde estuvo ingresada Teresa Romero, la enfermera contagiada del ébola en España por atender al misionero Manuel García Viejo, repatriado a España tras infectarse por el virus en Sierra Leona.

Cantón Moreno considera "adecuado" que se haya procedido a dicha desinfección, ya que todavía hay "muchas incógnitas" sobre el virus y "se debe aplicar el sentido común" y "eliminar cualquier posibilidad de que haya restos".

No obstante, ha apuntado, una vez sale el virus del organismo humano a través de secreciones o fluidos corporales su supervivencia depende de las condiciones ambientales (humedad y temperatura) a la que esté sometido.

"Parece lo más probable que las secreciones ya no estén, se van secando y el virus va disminuyendo ya que pierde su capacidad para sobrevivir", ha reconocido este experto, que precisa que la supervivencia varía también en función de la cantidad de secreción y del estado del paciente en el momento de expulsarla.

Una situación que pondría en duda que actualmente pueda haber restos del virus en aquellas zonas donde estuvo la paciente, que desde este martes está ingresada en el Hospital La Paz-Carlos III de Madrid.

El vicepresidente de SEIMC considera además que esto es importante para no generar "alarmismo" entre la población, especialmente en quienes viven cerca del domicilio de la paciente o deben acudir al hospital de Alcorcón donde estuvo atendida Teresa, "con el daño colateral que eso produce".

De hecho, recuerda Cantón Moreno, a diferencia de otros virus, su contagio es "muy difícil" y exige un "contacto directo con secreciones del paciente".