Un bajo colesterol puede proteger del cáncer de próstata más agresivo

La comida sana ayuda a prevenir el colesterol.
EP
Actualizado: martes, 3 noviembre 2009 19:57

MADRID, 3 Nov. (EUROPA PRESS) -

Los niveles bajos de colesterol podrían reducir el riesgo del cáncer de próstata más agresivo, según sugiere un estudio de las Instituciones de Salud Johns Hopkins que se publica en la revista 'Cancer Epidemiology, Biomarkers & Prevention'. Los investigadores descubrieron en su trabajo que los hombres con menor colesterol son menos propensos que aquellos con los niveles más altos a desarrollar cáncer de próstata de grado alto, una forma agresiva de la enfermedad con un pronóstico pobre.

En el estudio participaron más de 5.000 hombres estadounidenses y sus resultados, según afirman sus autores, evidencian que los niveles más bajos de grasa podrían reducir hasta casi un 60 por ciento el riesgo de un hombre de padecer esta forma de cáncer.

Según explica Elizabethz Platz, "por muchas razones, sabemos que es bueno tener un nivel de colesterol dentro de los rangos normales, ahora tenemos más evidencias de que entre los beneficios del colesterol bajo podría estar un menor riesgo de cánceres de próstata potencialmente mortales". El rango normal de colesterol total se define como menos de 200 miligramos por decilitro de sangre (mg/dL).

El mismo equipo científico descubrió resultados similares en un estudio publicado en 2008 en el que se vinculaban los fármacos estatinas reductores del colesterol con el menor riesgo de cáncer de próstata avanzado.

En el estudio actual, los investigadores analizaron datos de 5.586 hombres de 55 años o más que participaban en el Ensayo de Prevención de Cáncer de Próstata entre 1993 y 1996. Unos 1.251 hombres fueron diagnosticados con cáncer de próstata durante el estudio.

Los hombres con los niveles de colesterol menores de 200 mg/dL tenían un 59 por ciento menos de riesgo de desarrollar cánceres de próstata de alto grado, que tienden a crecer y a expandirse con rapidez. Los cánceres de alto grado se identifican mediante la puntuación Gleason. Las puntuaciones en la parte final de la escala, entre 8 y 10, indican los cánceres que más preocupan a los patólogos que examinan las muestras al microscopio.

En el estudio, los niveles de colesterol no tenían un efecto significativo sobre el espectro completo de la incidencia del cáncer de próstata, sólo sobre aquellos de alto grado.

Los investigadores advierten que, aunque se tuvieron en cuenta factores que podrían sesgar los resultados, como tabaquismo, peso, antecedentes familiares de cáncer de próstata y colesterol en la dieta, otros aspectos pudieron haber afectado a los resultados. Así, un ejemplo es si los hombres del estudio tomaban fármacos para reducir el colesterol en el momento en el que se tomaron las muestras de sangre, un dato que los investigadores esperan analizar pronto.

"El colesterol podría afectar las células del cáncer a un nivel en el que podría influir sobre los mecanismos de señalización que controlan la supervivencia celular. Las células cancerígenas utilizan estos mecanismos de supervivencia para escapar del ciclo normal celular de vida y muerte", apunta Platz.

La investigadora concluye que los tratamientos dirigidos al metabolismo del colesterol podrían ser una ruta para tratar y prevenir la enfermedad, aunque esto aún no se ha comprobado.