FUENSALDAÑA (VALLADOLID), 30 Ene. (EUROPA PRESS) -
El sindicato médico CESM y el PSOE de Castilla y León mantuvieron hoy un encuentro en el que ambas organizaciones manifestaron la necesidad de negociar el Estatuto Marco para el personal de las instituciones sanitarias y que no sea impuesto por el Gobierno regional, lo que supondría un conflicto "importante".
Así lo expresó hoy el secretario regional del sindicato médico CESM, Eloy Díez, quien se reunió en la sede de las Cortes Regionales con la secretaria regional de Sanidad del PSCL, María Teresa Rodrigo.
Díez explicó que tras la presentación de diferentes borradores de estatutos por parte de la Administración, ésta pretende sacar adelante su propuesta "con todas las consecuencias" sin aceptar negociaciones o cambios.
Esta es la razón por la que el sindicato ha solicitado reuniones con todos los grupos parlamentarios, para hacerles llegar su "inquietud, intranquilidad, miedo y cabreo", así como las consecuencias que se pudieran derivar de la aprobación por parte de la Administración regional sin consenso.
El secretario regional de CESM considera que el Estatuto es "completamente restrictivo", cierra posibilidades para poder negociar después una carrera profesional, frena el régimen retributivo y además obliga a traslados forzosos.
Aunque Díez aclaró que no suelen decir que no, cree que no debe haber una imposición, cuando se están llevando a cabo todos los trámites para su aprobación sin haber negociado, ya que mañana mismo habrá una Mesa General de Negociación y el siguiente paso será la Mesa de la Función Pública.
El secretario de CESM cree que antes de llegar a las Cortes regionales, el proyecto de ley de Desarrollo del Estatuto Marco debe contar con un "gran consenso" con todos los grupos políticos y los representantes sociales.
Además, cree que hay que dejar abierto el Estatuto para que pueda servir de negociación previa y los reglamentos que se hagan. "De un plumazo hacen todo, con una restricción de un calibre que no creo que deba ser así", dijo Eloy Díez.
Finalmente, advirtió de que utilizarán "todas las armas" que tengan en sus manos y de que puede llegar un "conflicto importante", dado que el sindicato tiene una importante representatividad, tanto en el sector médico como en enfermería a través de SATSE y cree que las demás centrales sindicales tampoco aceptarán el modelo, por lo que el conflicto puede ser generalizado.
APOYO DEL PSOE.
Por su parte, María Teresa Rodrigo explicó que su Grupo ya tenía claro que el borrador presentado no podía ser aceptado si entraba así en la Cámara, y esto suponía una advertencia también para que la Junta pudiera negociar con los sindicatos y los interesados en el proyecto, como es el personal de la Sanidad.
Todo ello, indicó la portavoz socialista, para que llegara con el máximo consenso a las Cortes, ya que en caso contrario están abocados a un conflicto que "merece la pena" pactar y aprobar con el apoyo de todos.
Así, mostró su coincidencia con la mayor parte de las cuestiones que plantea CESM como la seguridad de los trabajadores con respecto a su puesto, "que no está suficientemente clara", la falta de definición de la carrera profesional y muchas cuestiones sobre la jornada y las retribuciones.
"Tal y como está el texto obligaría a presentar una enmienda a la totalidad y después una revisión completa mediante enmiendas parciales", indicó Rodrigo, quien añadió que se trata de evitar la aprobación de algo que suponga "no sólo un enfrentamiento entre grupos políticos sino entre la gestión de Sacyl y sus trabajadores".
Además de con CESM, el PSCL se reunirá con UGT, que ya ha solicitado una cita para tratar este asunto, pero además se espera "tantear" a los sindicatos, mientras que a través de la organización sectorial se pretende pulsar la opinión general del sector sanitario, aunque cree que es unánime. En cualquier caso, considera que el proyecto "necesita maduración", un replanteamiento.
