Dice que seguirán pagando a las farmacias porque no van a "dejar de lado" a la sociedad catalana
VITORIA, 3 Nov. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, ha explicado este martes que el Gobierno central no va a permitir que "ninguna comunidad autónoma española entre en impago", pero ha defendido que es necesario que Cataluña "priorice los gastos para mantener las necesidades de los ciudadanos". "Están financiando la ruptura con España, pero no son capaces de pagar a sus farmacias", ha criticado.
Alonso ha realizado estas declaraciones durante la visita que ha realizado en Vitoria a la Fundación tutelar Beroa para personas con enfermedad mental, donde ha sido preguntado por el anuncio de la Conselleria de Finanzas de la Generalitat de que, a partir del próximo jueves, suspenderá pagos a farmacias por falta de liquidez.
El responsable de Sanidad ha afirmado que las farmacias catalanas están cobrando directamente del Estado, y que "su única posibilidad de cobrar las facturas ha sido el Ministerio de Hacienda, mientras vemos que la Generalitat de Cataluña destina partidas millonarias a otras cosas". "Están financiando la ruptura con España, pero no son capaces de pagar a sus farmacias", ha subrayado.
Por ello, ha insistido en que las farmacias catalanas las paga el Ministerio de Hacienda, a través del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA), "algo que va a seguir haciendo" el Gobierno central. "No vamos a dejar de lado a la sociedad catalana. Nuestra obligación es amparar a todo el mundo y, por tanto, seguiremos pagando las farmacias", ha señalado.
No obstante, ha explicado que comparte el discurso del ministro Montoro para "exigir que se prioricen los gastos que son para mantener las necesidades de los ciudadanos en Cataluña". "Esto empieza a ser una situación insostenible", ha advertido.
En este sentido, ha informado que el Estado ha destinado a Cataluña 48 millones de euros para "poder sostener esa comunidad, financiar los servicios públicos, algo que forma parte de nuestra obligación" porque "no podemos permitir que ninguna comunidad autónoma española entre en impago". "Éste es un país solidario", ha concluido.
