Un 30% de los conductores con apnea del sueño se han dormido al volante alguna vez, según un experto

Actualizado: martes, 20 junio 2006 18:00


MADRID, 20 Jun. (EUROPA PRESS) -

Un 30 por ciento de los conductores con apnea del sueño reconocen haberse quedado dormidos al volante en alguna ocasión, según se puso de manifiesto con motivo del curso 'Síndrome de Apneas e Hipoapneas durante el sueño', organizado con la colaboración de GlaxoSmithKline.

En concreto, el riesgo de siniestralidad en accidentes de tráfico y laborales es siete veces superior en estos pacientes, e incluso llega a once si se acompaña de pequeñas dosis de alcohol. Por ello, los expertos aconsejan despertar la conciencia de la población para que "el conductor somnoliento consulte al médico", así como concienciar a los pacientes, que en ocasiones ni siquiera reconocen la existencia de su patología. El síndrome de la apnea del sueño afecta a entre 1,2 y 2,1 millones de españoles, aunque sólo están diagnosticados y tratados entre el 5-9 por ciento.

La apnea del sueño también se relaciona con riesgo laboral y doméstico. Así, las alteraciones del sueño de origen respiratorio subyacen en el riesgo de sufrir accidentes de trabajo debido a una excesiva somnolencia diurna y una disminución del grado de atención. Durante 2004 se produjeron cerca de 1,7 millones de accidentes de trabajo en España, 18.000 de ellos asociados a esta patología.

MÉDICO DE ATENCIÓN PRIMARIA, CLAVE EN EL CONTROL

El curso organizado mañana en Valladolid se enmarca en la celebración del Año de la Apnea y de la calidad de suelo, iniciativa de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR) que tiene como objetivo dar a conocer esta enfermedad y la importancia de diagnosticarla y tratarla precozmente.

El doctor Félix del Campo, neumólogo del Hospital Río Hortega de Valladolid, vocal de la Junta Directiva de la SEPAR y coordinador del curso, explicó que se trata de dar a conocer la prevalencia e impacto sobre la salud que ocasiona esta enfermedad, los avances en el diagnóstico y tratamiento, así como señalar los criterios de derivación de los pacientes desde Atención Primaria a las unidades de trastornos respiratorios durante el sueño.

En este sentido, el doctor Campo destacó el papel esencial que juegan los médicos de familia en el manejo, cuidado y seguimiento de estos pacientes. Por ello, deben conocer bien la enfermedad, sus connotaciones y repercusiones y los criterios de derivación, así como la prioridad con que deben hacerlo, explicó.

Los pacientes identificados en AP con sospecha de apnea deben ser remitidos al especialista, preferentemente aquellos con apnea severa y riesgo de consecuencias graves para su salud como hipertensión arterial no controlada, en especial si se asocia a cardiopatía isquémica o patología cerebrovascular, y los profesionales en los que la somnolencia puede ser un riesgo como los conductores.

PERFIL DEL PACIENTE

El perfil clínico clásico del paciente con apnea del sueño es un varón obeso, de edad media que ronca intensamente y se duerme con frecuencia durante el día, incluso conduciendo. En las mujeres se da con mayor frecuencia en la menopausia y el síntoma mas relevante es la astenia.

Conseguir una adecuada higiene de sueño, reducir el peso en los pacientes con sobrepeso, evitar el tabaco y el alcohol, son algunas de las medidas generales recomendadas para estos pacientes. Por su parte, el tratamiento consiste en evitar el colapso de la vía aérea superior mediante la aplicación de una presión positiva continua o CPAP.

Respecto al diagnóstico, se tiende a la búsqueda de sistemas más sencillos en su manejo y aplicación, que puedan emplearse a domicilio y que sea posible utilizar por personal no experto, aunque los equipos en su estructura interna sean de gran complejidad, explicó.